El patinador español Javier Fernández, que logró este viernes su sexto Europeo consecutivo, aseguró a Efe que ahora quiere colgarse el oro en los Juegos Olímpicos de PyeongChang y el próximo año alzarse con un nuevo entorchado continental.

"Queremos conseguir una medalla olímpica. Vamos a entrenar y competir para lograr la medalla de oro, pero los rivales son muy duros y al igual que puede ser una medalla de oro, puede ser de otro color", señaló en un céntrico hotel moscovita.

Fernández, que fue cuarto en los Juegos de Invierno de Sochi en 2014, subrayó que sus rivales en los Juegos serán los coreanos Hanyu, con el que entrena el madrileño, y Shoma Uno, y el estadounidense Nathan Chen.

"Todo depende del día que yo tenga y del día que tengan mis rivales", dijo.

Consideró que la victoria en el Europeo invita al optimismo, ya que ha experimentado "mejorías" en el programa largo, su talón de Aquiles en las últimas competiciones.

"En Moscú me he encontrado muy bien y no sólo por tratarse de una oportunidad para poner a prueba nuestros programas, sino por tratarse de la última competición antes de los Juegos. Lo más importante es que tengo muchas ganas de volver a entrenar y de viajar a Corea", apuntó.

Aunque admitió que el Europeo no era el "objetivo primordial" esta temporada, opina que no se lo puede quitar mérito a la victoria, de la que se declaró "muy orgulloso".

"Es una victoria importante, ya que al fin y al cabo son seis Europeos seguidos y sigo haciendo historia en el deporte español y el patinaje internacional", apuntó.

A su vez, aseguró que, independientemente del resultado olímpico, se plantea seriamente el objetivo de lograr un séptimo trofeo continental consecutivo.

"Esperemos que no sea mi último Europeo. Es una meta que he pensado. Ya tengo seis consecutivos. ¿Por qué no tener siete? Si realmente tengo ganas, es algo que sé que puedo hacer", apuntó.

En cuanto a sus planes hasta los Juegos, el patinador tiene previsto viajar ahora directamente a Toronto para entrenar durante dos semanas antes de volar a PyeongChang.

Fernández señaló que, entre las muchas felicitaciones recibidas, le habían llamado el Rey de España, Felipe VI, y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.