Hoy ha pasado por sala de prensa Iñigo López. El central que no juega desde el último partido del 2014, ante el Barcelona, es consciente de que el encuentro del próximo lunes ante el Getafe es "vital", pero no entiende que sea decisivo y que una nueva derrota --la séptima-- dejaría al Córdoba descendido. "Mientras las matemáticas no lo confirmen, hay que pelear con el cuchillo entre los dientes", ha sido la contundente respuesta del zaguero.

Pero paradójicamente, el central no hace cuentas de los puntos que necesita la plantilla para salvarse. "Pensamos solo en Getafe y no en lo de los menos puntos. Siempre, todos los años, se dice que la salvación es de menos puntos y, luego, 39 o 40, ya he vivido otras hasta con 42. Si nos ponemos a pensar en los puntos que tenemos que hacer… primero Getafe y, después, Málaga".

Y es que, cuestionado si cree en las posibilidades reales de la plantilla de salvarse, Iñigo respondió que "esa pregunta me sobra. Si creo que no hay opciones, cojo mis cosas, me voy con la familia y, el año que viene será otro. No miro más allá de Getafe. Creo que es vital para sacar esto y para salvarnos que, sin lugar a dudas, creo que lo vamos a conseguir. No hay dudas en el vestuario".

El riojano ha analizado sus casi tres meses de baja. "Me lesiono en Barcelona, una microrrotura, dos o tres semanas. Estoy casi para Granada, se decide no arriesgar y en la víspera de Vallecas tengo una recaída y se procede con más preocupación. Por eso he tardado más en volver". Y, pese a que todo apunta a que volverá a reaparecer el lunes, el zaguero se ha mostrado prudente. "Hay un hueco por la baja de Pantic y la decisión es del míster. Preparado estoy. Llevo un mes entrenando con el grupo y tres partidos convocado y si hay una oportunidad debo aprovecharla, por el bien del equipo y por el mío, para sumar para conseguir el objetivo".

Iñigo coincide con el míster en que la plantilla es demasiado grande. "Somos muchos. El equipo entró en buena dinámica. No estoy lesionado. No me debe sorprender que vuelva. No hay que darle más vuelta. Hay compañeros de sobra. El día que llegue la oportunidad, aprovecharla".

Pese a las seis derrotas consecutivas y a los problemas derivados de lo extradeportivo, sanciones y expedientes incluidos, "el grupo está con muchas ganas de ganar que al final es como se refleja el trabajo nuestro y del club. Que el lunes se saque los tres puntos y que se empiece a hablar de otra cosa un poquito en la prensa y que en el club, la gente esté más tranquila y no estar pensando que tenemos seis derrotas seguida y, un poco, como al principio. Quitarnos la espinita con una victoria".

Getafe

Enfrente estará un rival que "también tiene bastantes problemas a nivel extradeportivo. Han cambiado dos veces de entrenador. Me consta que están apoyando al nuevo míster. Perdieron en Málaga pero hicieron dos goles. No estuvieron mal. Se jugan mucho, igual que nosotros, aunque tienen la ventaja de saber que un empate les deja por encima. Espero que vengan a ver lo que pasa, cómo salimos y, nosotros, ir a por ellos".

Preguntado también por el almuerzo de ayer del Córdoba Club de Fútbol SAD, Iñigo López confía en poderla repetir en otro contexto. "Una cosa de empresa, del club. En cualquier empresa hay reuniones. Contentos. Estuvimos unidos. Esperemos que se repita cuando logremos el objetivo".