España ya tiene la corona europea que tanto se le ha resistido. Los 'Hispanos' se sacaron de golpe en Zagreb las espinas clavadas por las finales perdidas en 1996, 1998, 2006 y 2016. Suecia, que había ganado las cuatro que había disputado aunque no alcanzaba una desde hace 16 años, no tuvo más remedio que claudicar esta vez ante la admirable progresión del equipo dirigido por Jordi Ribera. Comenzó con dudas, pero puso en práctica con éxito rotundo las variables precisas para desactivar al temible rival sueco, que acabó entregado mucho antes de lo previsto a la superioridad española. Con sus dos Mundiales (2005 y 2013) y este Europeo, a la seleccion española ya solo le falta el título olímpico para redondear un palmarés envidiable.

Estaba perfectamente al corriente el conjunto español de la idea fija sueca de desarrollar ante todo su extraordinaria capacidad para hacer daño al contraataque y no pudo contrarestarlo de entrada debido a la inspiración de Appelgren en la portería. Cuatro intervenciones felices del guardameta nórdico permitieron a su equipo marcharse en el marcador 4-7 sacando buen provecho de las dificultades españolas para hacer los cambios ataque-defensa, que también aparecían por la rapidez de los suecos en sacar rápido de centro en cada gol español.

Falta de acierto inicial

Problemas agravados con la falta de acierto española desde larga y media distancia ante una defensa 6-0 muy potente que apenas dejaba espacios por donde flitrar pases al pivote Aguinagalde y cerraba con eficacia las puertas a los extremos.

Con todo, los 'Hispanos' tuvieron paciencia para no caer en la precipitación y aprovecharon la exclusión de dos minutos de Zachrisson para ponerse un solo gol abajo (9-10) gracias a un gran tanto de media distancia de Álex Dujshebaev en suspensión y a un gol de Ariño a la contra.

Cambio en la portería

Se habían cumplido 23 minutos de juego y Jordi Ribera tomó la decisión de colocar en la portería española a Sterbik, lo que a la postre resultó decisivo para que España pudiera cambiar radicalmente el chip después de irse al descanso por debajo en el marcador 12-14.

Comenzó el portero serbio nacionalizado su recital nada más reanudarse el juego, Balaguer empató (14-14) en un contraataque tras una gran parada y los 'Hispanos' ya no pararon. Lograron atascar completamente a Suecia con una defensa 5-1, con Álex Dujshebaev en posición de adelantado, y en un abrir y cerrar de ojos la endosaron un parcial de 4-0 para ponerse por encima (15-14) por primera vez desde el minuto 3 de partido.

España domina

A partir de ahí España disparó sus prestaciones en todos los aspectos del juego. Sterbik siguió agrandándose ante los lanzadores suecos, la defensa mixta española no dejó de responder a satisfacción plena y en ataque el juego combinativo español acabó por descomponer una y otra vez el esquema defensivo de la selección nórdica.

Todo funcionó perfectamente engrasado para alcanzar un parcial favorable de escándalo -11-2 en el segundo tiempo a falta de seis minutos para el final—que solo podía llevar al título continental. Para rematar la faena emergió Alex Dujshebaev, imparable en el tramo final, en el que Suecia solo pudo acercarse a seis goles, sin posibilidad alguna de quebrar la carrera imparable de la selección española hacia la corona europea y acabar así con su maleficio continental.

España 29 - Suecia 23

España: Corrales; Solé (5, 3p), Gurbindo (1), Sarmiento (1), Entrerríos (4), Valero Rivera (1), Aguinagalde (1) -equipo inicial--, Sterbik (ps), Balaguer (5), Ales Dujshebaev (4, 1p), Cañellas, Morros, Goñi (1), Ariño (4), Guardiola (1), Figueras (1).

Suecia: Appelgren; Ekberg (4, 1p), Arnesson (1), Darj, Nielsen (5), Henningsson (2), Wanne (3) -equipo inicial—Palicka (ps), Jeppson (1), Tollbring, Petersson, Gottfridsson (2), Cederholm, Ostlund, Zachrisson (3), Nilsson (2).

Parciales: Marcador cada cinco minutos: 3-3, 4-5, 5-7, 7-10, 10-12, 12-14 (descanso), 15-14, 18-15, 21-16, 23-17, 26-19 y 29-23 (final).