La selección nacional vivió una jornada de fiesta y de máxima alegría colectiva al lograr un meritorio triunfo frente a Rumanía (22-10) que les permite depender de sí mismos para conseguir el billete al Mundial de Japón 2019. Si España cumple en las dos batallas que le quedan, ante Alemania y Bélgica, estará en un Mundial de este deporte por segunda vez en su historia.