Nunca está de más solicitar la ayuda divina para completar la gesta de una remontada de la que no se tienen registros en Segunda. Tras recortar la distancia con la permanencia en nueve puntos y dejarla a solo cuatro, la primera plantilla del Córdoba, junto a su entrenador, Sandoval, y al presidente, Jesús León, realizó ayer una ofrenda a la Virgen de los Dolores, en su iglesia de la Plaza de Capuchinos. Javi Lara, Alejandro Alfaro y José Fernández, capitanes del conjunto cordobesista, fueron los encargados de portar las flores que dejaron junto a la dolorosa, antes de que el presidente León hiciera unas declaraciones breves a la prensa allí desplazada.

El propietario trató de rebajar la euforia generada en el cordobesismo por las cuatro victorias consecutivas, y afirmó que «la ilusión y la unión» no pueden acabar en «euforia», ya que «el mensaje» que debe primar es el de la «prudencia». León indicó que «hay que mirar partido a partido». «Cuando acabó el encuentro de Tarragona la mentalidad cambió ya a pensar en el Oviedo, y ese es nuestro único reto. Antes de estas cuatro victorias hablaba de matemáticas y ahora sigo hablando de ellas. Vamos a agarrarnos a eso. Es difícil controlar la euforia y hay que hacer un esfuerzo añadido. Vamos a tener esa ilusión, pero con prudencia», repitió.

Sobre la cuestión del límite salarial, Jesús León quiso ser muy claro: «La gestión desde el 19 de enero es intachable. Hemos hecho las cosas muy bien, de acuerdo a la normativa que tiene la ley implantada. He mantenido conversaciones con la Liga y no hay nada que temer, porque lo hemos hecho todo correctamente».