El Nástic vivió ayer sus últimos minutos como equipo de Segunda División y los primeros como integrante matemático de la Liga de las Estrellas. El conjunto de Luis César escribió su nombre en letras de oro en los anales de un club que el único ascenso a Primera lo vivió en la temporada 1946-47.

El empate ante el Xerez en Chapín quedará para siempre en la memoria de un club que celebrará por todo lo alto sus 120 años de historia. El Club Gimnástic, fundado en 1886, es el primer club polideportivo de España, pero hasta 1914 no creó su sección de fútbol.

Ayer, Pinilla, Diego Torres, Serrano, Codina, Abel Buades, Merino, Manel Ruz, Rubén Pérez, David Cuéllar, Bolo y Lupidio, el once inicial, emularon a Babot, Ricard, Perez, Soro, Catalá, Conesa, Aylagas, Barceló, Coll, Balmanya y Sánchez, los del ascenso de 1947.

La ciudad de Tarragona volverá a estar representada en una de las mejores Ligas del mundo. Cuando lo logró en 1947, era la menos habitada (39.500 personas) de Primera División. Las cosas cambian, pero el sueño ahora hecho realidad no puede desligarse del recuerdo de las tres temporadas que el Nástic vivió en Primera, de 1947 a 1950.

El ascenso logrado ayer se cimenta en una gran segunda vuelta de campeonato.