LEGANES: Raúl; Pardo, Macanás, Alessandria, Navas; Arrúe, Nico Medina, Melgar, Kuhl (Txiki, 68´); Borja (Enría, 75´) y Calandria (Mustafá, 89´).

GETAFE: Sergio Sánchez; Mario Cotelo, Amaya, Belenguer, Bernaus; Alberto, Vivar Dorado, Cubillo (Angel Castro, 88´), Gari Uranga; Craioveanu y Pachón.

ARBITRO: Amoedo Chas (Comité gallego). Expulsó por doble amonestación a Alessandria. También vieron cartulina amarilla Pardo, Arrúe, Vivar Dorado y Cubillo.

INCIDENCIAS: Nutrida representación de seguidores getafenses.

El Getafe vio frenada su racha de victorias en el derbi del sur de Madrid, en el que el Leganés, necesitado de los puntos en su lucha por la permanencia, le plantó cara y equilibró su teórica inferioridad técnica.

El conjunto de Josu Uribe no estuvo cómodo nunca sobre el campo. Ni cuando hizo sol en la primera mitad ni cuando el aguacero hizo acto de presencia en el segundo tiempo y el campo fue casi una pista de patinaje, aunque al final, con un hombre más por la doble amonestación de Alessandría, tuvo su opción para llevarse su sexta victoria consecutiva, pero el disparo del rumano Gica Craioveanu fue detenido en una enorme intervención por el meta Raúl Arribas.

El empate fue el marcador justo en un duelo de eternos rivales muy equilibrado, emocionante y con buen juego tan solo en los compases iniciales de ambos periodos. El Leganés puso más empuje para mermar las mayores opciones getafenses, cuyos hombres clave aparecieron en el sitio de la verdad en contadas ocasiones.

Los pupilos de Juanjo Martín Delgado trabajaron a destajo para evitar la conexión Vívar Dorado-Craioveanu-Alberto, que tan buenos resultados le ha dado al Getafe con su calidad en el último pase. Melgar y Nico Medina secaron la salida del esférico y los azulones --en esta ocasión de rojo-- lo acusaron.