Cuando el presidente del Córdoba, Carlos González, ficha a un entrenador para el filial está pensando en que se puede convertir en el próximo dirigente del primer equipo". Esa es la máxima de la política del club que desveló Pablo Villa cuando todavía era el entrenador del Córdoba B y ya se hablaba de la posibilidad de que promocionase al primer equipo.

Sin tantas aspiraciones pero con mucha ilusión tomó ayer las riendas del filial blanquiverde el exjugador del Córdoba Pepe Puche. "Ahora me preocupo más por ayudar a José Antonio Romero en la confección de una plantilla competitiva para seguir la inercia de la temporada pasada".

En este sentido, el preparador murciano es consciente de las dificultades que plantea la nueva campaña, con bajas muy destacadas en el B: Fran Cruz, Jesús Toscano, Toni Seoane, Javi Cabezas, Javi López y un largo etcétera. Puche ha estado siguiendo, en la medida de sus posibilidades, la campaña histórica que ha protagonizado el filial de Pablo Villa. Conoce a los jugadores. Conoce la ciudad. Conoce la afición. "Para mí es una motivación extra estar en Córdoba".

PASADO GLORIOSO // Puche formó parte de aquella plantilla que aupó al Córdoba a Segunda A, hace ya 14 años en Cartagena. "Tengo la misma intensidad como técnico que como futbolista. Siempre tuve vocación de entrenador, porque vivo con mucha intensidad esta profesión", reconoce el de Yecla. Puche afronta este reto, tras entrenar al juvenil del Xerez y al Balón de Cádiz, para volver a enganchar al cordobesismo con su filial.