El Juzgado de Instrucción número 4 de Las Palmas de Gran Canaria ha condenado a dos meses de cárcel a tres de los jóvenes que protagonizaron algunos de los incidentes más graves ocurridos al término del partido en el que la UD Las Palmas y el Córdoba se jugaban el ascenso a Primera, el pasado 22 de junio y que tras la reanudación finalizó con el ascenso de los blanquiverdes con gol de Uli Dávila. La sentencia fue adelantada ayer por el diario La Provincia .

La sentencia se dicta por conformidad, después de que Mikel Jesús R.S, de 18 años; Elliot A.S., de 18; y Cristian Ramón V.A., de 25, se reconocieran culpables ante el juez de un delito de perturbación del orden público y aceptaran la pena propuesta por la Fiscalía. Los tres tendrán prohibido acudir al estadio de Gran Canaria durante un año y Elliot A.S. deberá pagar una multa de 78 euros por haber dado una patada al jugador del Córdoba Mendi, unos hechos que captó un fotógrafo. Los protagonistas de esta sentencia fueron las primeras personas identificadas por la Policía tras los graves incidentes acontecidos el pasado 22 de junio en el estadio de Gran Canaria, cuando decenas de aficionados --algunos de ellos procedentes de la calle-- saltaron al terreno de juego y provocaron que se detuviera el partido. La situación estuvo a punto de provocar la suspensión del choque y obligó al propio presidente de Las Palmas, Miguel Angel Ramírez, a bajar al césped a pedir al calma, consciente de que una decisión arbitral de ese tipo podía acarrear la pérdida del encuentro y del ascenso.