¿Cómo le va por Valladolid pese a la lesión?

Contento, es una ciudad que me ha sorprendido muchísimo, muy acogedera. Con gente educada donde el fútbol se vive de otra forma y me ha acogido muy bien, al igual que el club y la ciudad. La mala suerte de la lesión me ha roto esa progresión pues venía jugando todos los partidos.

El Valladolid se enfrenta al Córdoba. ¿Le habría gustado estar este domingo en El Arcángel?

Para mí era un partido especial, marcado en el calendario. Intentaré estar si puedo ir, aunque sea para estar en la grada y ver a mucha gente que conozco allí. Fueron tres años muy especiales para mí y la lesión me va a impedir estar en el césped. Es una verdadera faena.

Llegó en la temporada 2014/15 con el Córdoba en Primera. Había mucha ilusión pero ni el transcurso de la temporada ni el final fue el más deseado.

Fue un año complicado. Había mucha ilusión y todo lo que se puso en intentar mantener la categoría. Hasta diciembre o enero el equipo estuvo vivo, pero a partir de febrero se descolgó y fue un año difícil.

¿Fue su peor momento en el Córdoba o hubo otros más delicados?

Ese fue un momento difícil, pero también fue triste la eliminación del play-off ante el Girona al año siguiente o mi marcha. Esos no fueron demasiados agradables, pero me quedo con los bonitos momentos que he vivido allí, que fueron muchos, más que los malos.

En la 2015/16, pese a que el Córdoba cayó eliminado del play-off, fue una gran temporada.

Fue un año muy bonito, sobre todo en la primera vuelta, donde el Córdoba hizo números que nunca había hecho antes en Segunda. De hecho acabamos líderes. Ya en la segunda hubo otras circunstancias, como las lesiones, que impidieron al equipo mantenerse en el ascenso directo, pero pudimos entrar en play-off por méritos propios. Pese a ponernos por delante en Girona, no supimos cerrar el partido y se nos escapó el ascenso. Fue un año idóneo para volver a Primera, pero no se dio la ocasión.

¿Cómo vivió el vestuario ese periodo en el que el Córdoba perdió siete partidos seguidos en casa?

Fue un periodo complicado, pero había un vestuario increíble, éramos una gran familia y el equipo siempre mantuvo la calma pese a no ganar en casa. Fuera conseguimos puntos y accedimos al play-off. Los recuerdos que tengo de aquel año son espectaculares porque a nivel futbolístico me fue genial, prácticamente jugué todos los partidos y conseguimos hacer un grupo increíble.

Llegó casi el día después de que el Córdoba subiera a Primera a jugar de mediocentro y terminó jugando de central y capitán del equipo.

Cuando llegué sabía que podía jugar en las dos posiciones. Es cierto que en Primera División jugué más partidos de mediocentro, pero ya en Segunda y con el míster que había, Oltra, jugué de central, en la que había sido siempre mi posición. Es donde más cómodo me encuentro.

La temporada posterior a la del play-off, el equipo tuvo que pelear por salvarse cuando había otros objetivos.

Empezamos muy bien, todo tenía muy buena pinta y con la salida de Oltra se complicó todo. Además sufrí la primera lesión de mi carrera deportiva y el equipo entró en una dinámica negativa de la que no era capaz de salir. Al final conseguimos dejar atrás esas malas sensaciones y entre todos dimos un paso al frente y el equipo salvó una categoría que se había puesto muy difícil.

Al final el equipo consiguió salvarse y teniendo en cuenta que era capitán del equipo, ese verano cambió Córdoba por Valladolid.

Fue algo inesperado pues me restaba un año de contrato. Las cosas del fútbol. Al final el Córdoba decidió que no contaba conmigo y decidí buscarme otro equipo.

Era un peso pesado en el club y resultó extraña su salida.

A mí me resultó extraña igualmente, pero gracias a Dios en Segunda División se me tiene bastante considerado y desde que me comunicaron eso, mis representantes se pusieron a trabajar y encontramos varios equipos rápidamente.

Sorprendió, cuanto menos, porque era público que tenía un buen trato con Carlos González.

Era el capitán del equipo y, al fin y al cabo, tenía que mantener el grupo unido y él era mi jefe. Pero una vez salí del Córdoba, ya está. Aunque hubo muchas salidas ese verano. También Luso, Pedro Ríos, Cisma...

¿Cómo ve al Córdoba desde la distancia?

Me da mucha pena la situación que tiene el Córdoba ahora mismo. Un equipo donde se invirtió mucho dinero para pelear por otras cosas y no salió. Tiene una situación bastante complicada, a 13 puntos de la salvación, con la esperanza de que salga, ojalá. Se pasa mal y prácticamente estoy todos los partidos sufriendo con el equipo.