No acaba de fiarse Cristiano Ronaldo de que la oferta en firme de190 millones de euros por Neymar al Barcelona sea solo del Manchester United, como sostienen en los aledaños de Old Trafford, pese a que el padre del jugador dijera ante el juez de la Audiencia Nacional que hay varios clubs interesados en llevarse a su hijo.Florentino Pérez no ha considerado conveniente esta vez tranquilizar a su estrella desde Chicago, donde se recupera de la operación de hernia cervical a que se sometió el martes pasado en el Northwestern Memorial Hospital. No lo ha hecho ni lo hará por el momento, aunque el presidente blanco es consciente de que los rumores sobre una improbable maniobra para hacerse con los servicios del azulgrana no hacen más que alimentar las dudas del portugués en torno a su futuro en el Madrid.

El propio Ronaldo se encargó de abonar una posible marcha en varias ocasiones durante la etapa de Rafa Benítez en el banquillo blanco. La última, a mediados de diciembre cuando dijo en The Associated Press que está preparado para todo. “Estoy listo para quedarme en el Madrid, para irme, para terminar mi carrera cuando llegue el momento. Es parte de mi trabajo”, dijo el portugués. Desde la llegada de Zinedine Zidane, con quien le ha cambiado la cara, no ha vuelto a referirse a un asunto que está en el aire desde la pasada pretemporada y que, salvo que el equipo blanco logre levantar alguno de los dos grandes títulos en los que le quedan opciones, volverá a estar cada vez más presente según se acerque el final de la campaña.

EMPATÍA y EMPATE

Que el técnico francés se apresurara a decir que es el alma del Madrid, el emblema del madridismo y, por supuesto, “más queinstransferible” satisfizo a Ronaldo, que se sintió obligado a corresponderle tras la segunda goleada con Zizou al frente, al Sporting, en la que se reencontró con el gol y anotó dos después de haberse quedado a cero en la primera al Deportivo.

“Tenemos más empatía con Zidane que con Benítez… Zinedine es una persona tranquila y seria en el trabajo. Habla y empatiza con los jugadores. Estoy ilusionado y contento”, declaró. A los siete días volvió a quedarse sin mojar en el empate a uno contra el Betis que echó toneladas de tierra sobre las ilusiones que había generado la llegada del nuevo entrenador, a quien, ahora que todavía sigue viva la esperanza, han aprovechado para inaugurarle una exposición en el Instituto Francés de Madrid con 39 fotografías de sus últimos 100 días como jugador. Su autor, el fotógrafo y escritor Philippe Bordas, tuvo que archivarlas después del cabezazo a Materazzi en la final del Mundial de Alemania 2006, obligado a dejar para mejor ocasión su exhibición y la publicación del libro proyectado.

De momento, la asistencia de madridistas a la muestra puede considerarse un éxito y sus organizadores rezan para que la visita a Granada no acabe en un fiasco parecido al del Villamarín. El Madrid suma tres salidas sin ganar -derrota ante el Villarreal y empates con Valencia y Betis--, en las que Ronaldo no apareció. Sus goles este curso siguen siendo de calderilla (19 en Liga y 11 en Champions), por más que presuma de encontrarse en “un momento espectacular” en su carrera, como hizo el viernes en un vídeo de agradecimiento a sus fans por las felicitaciones recibidas con motivo de su 31 cumpleaños. Le quedan dos años y medio de contrato con el Madrid, casualmente el mismo tiempo que a Neymar en el Barça, y nadie pondría ahora mismo la mano en el fuego por que va a cumplirlos.