La crisis que vive el fútbol se verá reflejada en presupuestos de los clubs de Segunda División A de una manera prácticamente global. Solo cuatro equipos se salvan de las cifras mediocres en las que se van a mover prácticamente todos de cara a la próxima temporada. Se sale de la lista el Deportivo de La Coruña, un histórico de Primera que supera con creces a los demás. Maneja una partida de 45 millones de euros, 21 de los cuales irán destinados a pagar a la plantilla y el cuerpo técnico. Una barbaridad para una categoría de plata en la que la media total es de unos 8 millones, un dato que baja hasta los poco más de 5 millones si no tomamos en cuenta las cifras de los cuatro con más recursos.

Tras los gallegos, se sitúa el Almería, un recién descendido que tiene una partida de 11 millones; el Hércules, que también acaba de bajar y de entrar en concurso de acreedores, con unos 6,5 solo para salarios deportivos; y el Celta de Vigo, que contará con unos 8 millones en total.

El concurso de acreedores en el que están o han estado inmersas varias entidades hace que haya bastante descompensación entre el presupuesto global y el destinado a la plantilla. Es el caso del Córdoba (6 frente a 2,5), el Recreativo de Huelva (5,3 frente a 2,3), el recién ascendido Murcia (7,5 frente a 4) o el Xerez (5,5 frente a 3), que tendrán que utilizar buena parte de sus ingresos para pagar sus deudas del pasado. El club blanquiverde tiene uno de los seis presupuestos más bajos y, de los que han ofrecido datos hasta ahora, la UD Las Palmas es la última de esta clasificación económica, con solo 3 millones.