Vuelve la Champions, la mejor competición de clubs del mundo, que este jueves sortea en Mónaco (17.45 h. La Sexta y BEIN Sports) la fase de grupos en la que entran los 32 equipos que el 13 y 14 de septiembre empezarán a medirse con el reto de alcanzar la final de Cardiff del próximo 3 de junio. Madrid, Barça y Madrid, por este orden, se han repartido los últimos tres títulos continentales, en una muestra del dominio del fútbol español en Europa, un poderío plasmado también en la segunda competición europea, en la que el Sevilla ha exhibido su poder absoluto en los tres últimos años.

ALTERNANCIA CLÁSICA

Romper el dominio de Barça y Madrid

Los dos grandes de la Liga prolongan su eterna lucha doméstica al ámbito europeo, convertidos en los grandes dominadores de los últimos 11 años. Cuatro Champions ha ganado el Barça en este periodo y dos el Madrid (además de sumar ambos seis semifinales consecutivas, hito que logró el equipo azulgrana en el 2013 y que igualó el blanco la temporada pasada). Pero ninguno ha logrado hasta hoy lo que se ha convertido en el gran reto del torneo: conquistar dos veces consecutivas la copa de las grandes orejas, un honor que esta campaña solo puede alcanzar el equipo de Zidane. Eso sí, con permiso del Barça de Messi, Suárez y Neymar, y de los grandes expresos que se unen al grupo de favoritos. Es el caso del Bayern de Múnich, que aspira a reinar de nuevo en Europa (el último título fue en el 2013) con Ancelotti y recuperar una hegemonía que se le negó en la era Guardiola.

También el Paris Saint Germain, ahora con Unai Emery, aspira a dar el salto definitivo en una competición en la que nunca ha llegado más allá de cuartos de final, una decepción porque por nombres y dinero, a los franceses se les supone una fortaleza que, por ahora, no aparece en los momentos decisivos. También la Juventus, ahora sin Pogba pero con Higuaín, busca un título que se le resiste desde hace 21 años y que el Barça le birló en Berlín en el 2015. La novedad entre los cabezas de serie es, sin duda, el Leicester, para el que será ya toda una gesta meterse en los octavos de final. Eso sí, nada daría más morbo y trascendencia a la competición, más de la que ya tiene, que una final entre Barça y Madrid, un duelo soñado y temido a la vez, que ha estado cerca de producirse en los últimos años y que trasladaría al vencedor a una nueva dimensión.

LOS OTROS ASPIRANTES

El Atlético del Cholo busca su justicia

Si no fuera por las normas del torneo, el Atlético de Simeone estaría en el bombo de los cabezas de serie. Subcampeón de Europa la pasada campaña y en el 2014, los rojiblancos anhelan alcanzar de una vez la gloria que seguramente les toca por justicia histórica pero que el destino, y el Madrid, les han birlado. Los atléticos, con el mismo bloque, volverán a ser un conjunto difícil de batir, lo mismo que el Dortmund, el Nápoles y el City de Guardiola, los otros tres cocos del segundo bombo.

El Arsenal de Wenger, en una de las últimas opciones del entrenador francés de codearse con los grandes, y el Oporto de Casillas, que ha presentado sus credenciales tras golear eliminar al Roma, son los otros dos que entran en el grupo de los segundos cabezas de serie.

LOS TAPADOS

Tottenham y Lyón, los más peligrsos

También sorpresas depara el tercer bombo, allí donde se refugian los equipos de la clase media europea, clubs venidos a menos o con ánimos de reivindicarse entre los mejores. Es el caso del Tottenham que, con Mauricio Pochettino al frente del banquillo, aspira a dar guerra y hacerse respetar.

Con el mismo ánimo se presenta el Olympique de Lyón, ansioso por obtener el protagonismo que le birla la tiranía absoluta del PSG en Francia y recuperar la imagen de su mejor época, con Benzema y Juninho Pernambucano. También el PSV Eindhoven de Cocu y el Sporting de Lisboa buscan hacerse respetar en un torneo que concede gloria, repercusión mediática y mucho dinero. Solo por participar, el pellizco ya es de 12 millones. Una bolsa suculenta que puede alcanzar los 50 millones para el campeón sumadas todas la victorias y los sucesivos pases de todas las eliminatorias.

OTROS HUESOS

El Celtic, un conocido que siempre vuelve

El equipo escocés es un viejo conocido del Barça que suele cruzarse en su camino en la fase de grupos. Rocoso y duro de pelar en su estadio, baja enteros lejos de casa. Borussia Moechengladbach y Mónaco (que ha eliminado al Villarreal) son los otros dos huesos del grupo, en el que también destaca la inesperada presencia del Rostov tras arrollar al Ajax en la eliminatoria.