Lluis Carreras manifestó ayer sobre el duelo de mañana que "la presión, normalmente, la tiene el equipo que juega en casa. Ahora, somos dos equipos que tienen urgencias en acercarse o mantenerse en los puestos de arriba y el nivel de autoexigencia es alto" y en cuanto al ambiente que se puede vivir en El Arcángel restó importancia al asegurar que "no necesitamos ni el factor ambiental del equipo rival para automotivarnos para este gran partido".

El técnico maño, que se ha distinguido por intentar dar un plus estético al juego de sus equipos, dejó este aspecto apartado temporalmente, ya que "buscamos resultado". Carreras tiene claro que "se debe ganar. Vamos a intentar ganar y ganando ya veremos la imagen que hemos dado. No me consuela que demos una buena imagen si perdemos. Hay que ganar como sea. No me consuela perder con una buena imagen", insistió.

Finalmente, recalcó la importancia de Florin Andone, del que comentó que "es de lo mejor de la categoría. Lo que me preocupa es que mis centrales estén a la altura y que rindan como lo hacen últimamente. Vamos a ver si se recupera Xisco o De Tomás o cambian el modelo", aunque valoró la importancia del rumano en este Córdoba: "No juega solo pero sí es cierto que en determinadas ocasiones del partido coge esa responsabilidad ofensiva y no necesita a nadie. Crea peligro solo con cualquier balón", por lo que su equipo deberá estar "muy atento a las vigilancias defensivas". En cualquier caso, Carreras defendió que el partido de mañana no es decisivo o, al menos, lo es en la misma medida que el resto.