No suele darse por vencido Carlos Soria por más trabas que se tope en el camino. Por eso ahora, con 79 años ya cumplidos (los hizo el 5 de febrero), el veterano montañero español vuelve al Himalaya para intentar uno de los dos ochomiles que todavía faltan en su espectacular palmarés. Se trata del Dhaulagiri (8.167 metros), una cumbre que ha intentado en siete ocasiones y en todas ellas se le ha resistido.

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"Os aseguro que vamos a subir, esta vez lo haremos. Solo hemos de tener un poco de suerte", ha afirmado Soria en Madrid durante la presentación de la expedición, patrocinada por Ifema, empresa que a última hora ha posibilitado que este tapicero ya jubilado y nacido en Ávila no haya tenido que pagarse de su bolsillo la expedición.

A solo 80 metros de desnivel

Soria parte el lunes hacia Nepal acompañado de su equipo habitual: Sito Carcavilla (alpinista y geólogo), Luis Miguel Soriano (alpinista y cámara) y el médico Carlos Martínez. Soria ya ha estado muy cerca de la cima del Dhaulagiri en varias ocasiones, aunque la vez que estuvo más próximo fue el año pasado, cuando una intensa niebla durante el ascenso hizo que el grupo se equivocara de ruta. Se quedaron a tan solo 80 metros de desnivel de la cima, apenas un par de horas de ascensión).

"Vamos a hacer las cosas bien, con humildad y con toda veracidad", ha agregado Soria, un montañero honesto que siempre pone la seguridad por delante. Quizá por eso, nunca ha tenido un accidente en la montaña, donde, como él mismo afirma, "hay que jugársela lo menos posible". El reto de Soria es subir al Dhaulagiri y, en caso de conseguirlo, intentar en otoño el Shisha Pangma (8.013 metros), el otro coloso del Himalaya que le falta por subir.