TRAYECTORIA: CORDOBÉS, DOCTOR EN VETERINARA, PROFESOR DE LA FACULTAD DE VETERINARIA, MASTER EN EQUINOTECNIA Y ADSCRITO AL HOSPITAL CLÍNICO VETERINARIO.

Carlos Ponferrada es juez de raid y ha sido nombrado por la Federación Ecuestre Internacional (FEI) asesor de gobierno independiente (IGAs en sus siglas inglesas). Este cordobés compartirá responsabilidad con un británico y un italiano en el máximo organismo ecuestre internacional.

--El mundo del raid está a sus pies. ¿Cómo ha llegado a ello?

--Por mi trayectoria en la competición internacional. Estoy en la FEI desde 1999. Aunque tienen que ver ciertos hechos relacionados con la salud del caballo, ya que tengo que vigilarla, al igual que el fair play .

--¿Cuáles fueron estos hechos?

--Algunas personas relacionadas con la FEI valoraron mi actuación, en la que no he cedido a presiones externas. En una final de un Campeonato del Mundo dije que el primer finalista estaba cojo y no podía ser campeón. El resto de compañeros lo dieron como campeón. Alguien observó que yo había votado con honestidad. Y ahora me han nombrado IGA. Aunque he estado desde el 2003 al 2011 sin que me llamaran en España, por defender siempre los derechos del caballo.

--¿Cuál es su misión?

--Asesorar para que las pruebas se desarrollen correctamente. Vigilar el comportamiento de jinetes, grooms , comités organizadores y caballos. Que todo suceda por los cauces normales.

--Y después informar a la FEI.

--Sí. Y este informe es vinculante para que la FEI tome las decisiones oportunas.

--¿Qué ha influido para que usted sea oficial de la FEI?

--El que sea veterinario para los caballos. Es una gran responsabilidad. Si me llaman para trabajar, involucrarme en el deporte del caballo para que el caballo sea el menos perjudicado.

--¿Es el caballo el eslabón más débil en la competición?

--Sí. No tiene voz. No decide. Todos lo hacen por él. El propietario, que decide si corre, aunque esté cojo; el jinete, que lo haga lo más rápido.

--Y usted vela por él-

--Para luchar por los derechos del caballo a través de la FEI, que está para ello.

--¿Tan necesario es su cargo?

--Sí. Y no es un cargo agradable. Estaré en él por un periodo de dos años. Y después de este tiempo habrá personas de mi entorno personal que no les gustará mi trabajo. Desde oficiales hasta comités organizadores, propietarios, jinetes y entrenadores.

--¿Merece la pena?

--Es una decisión muy madurada. Yo tengo mi vida aparte, que son los caballos.

--¿Tanto influyen los caballos en su vida?

--Soy lo que soy por los caballos: como persona, como profesional y estoy con mi pareja por los caballos. Hay gente que vive gracias a los caballos. Yo vivo por los caballos.

--Se le conoce como "el de la doma natural", ¿qué tiene esta doma?

--Comunicación: del caballo contigo y viceversa. Si tú no llamas la atención del caballo, lo que intentes enseñarle no funcionará.

--Hay que tener una preparación especial-

--Mucha. Hay que estar preparado física y psíquicamente y tener la empatía suficiente. No hay que darle al caballo lo que éste quiere, sino lo que necesita. Ganarse la confianza del caballo. La equitación es la responsabilidad de lo que el caballo va a hacer.

--¿Cuál es la clave?

--Al caballo es muy sencillo montarlo si hacemos que utilice su cabeza, no sus patas. La clave es la educación.

--¿Qué es la doma natural, en la que lleva tanto tiempo?

--Es una doma sin violencia pero con gran contenido físico. El caballo es muy sabio, está capacitado para aprender de todo y en todo. No es una doma para pusilánimes. Requiere una gran dosis de valentía y de preparación ante el fracaso. A veces se fracasa. Todo esto es fundamental para comenzar bien el camino.

--¿Ha recibido felicitaciones?

Sí. De amigos cercanos, pues no estoy muy introducido en Córdoba. Aunque todo es por Córdoba. Es tierra de gente con cultura del caballo, cuenta con una prestigiosa Facultad de Veterinaria y ha habido y hay grandes jinetes de raid. Yo he participado hace más de veinte años en ellos. Pero lo que más me motiva es la defensa y dignidad del caballo.