Era necesario meter algo de energía, de vitalidad, de sangre nueva. También lo habríamos hecho su hubiésemos hecho un buen papel en Brasil, pero tenemos un bloque hecho, sin ninguna duda. No creo que hayamos dado muchos bandazos. Hemos hecho las cosas que teníamos que hacer", ha dicho este jueves en rueda de prensa Vicente del Bosque, tras la llegada a Sevilla de la selección española, que este viernes disputa en el Sánchez Pizjuán el quinto partido de la fase de clasificación para la Eurocopa de Francia, en la que marcha segunda, empatada a puntos (9) con Ucrania, su rival.

"No podemos estar todo el día pensando en lo que pasó en Brasil. Debemos mirar hacia Francia, donde vamos a defender el título europeo ganado en Kiev hace tres años, que parece que es algo que se olvida", ha añadido el seleccionador, que ha asegurado que ni la polémica por la final de la Copa del Rey ni la reciente celebración del clásico en el Camp Nou han interferido en el trabajo de 'la Roja'. "Sabemos de la importancia de los clubs en el día a día y no nos incomoda nada", ha señalado.

El técnico salmantino ha dejado entrever que Morata será titular en el eje del ataque y no ha descartado que Iniesta e Isco, aunque parece algo poco probable, compartan titularidad. También Busquets estará en principio en el equipo inicial contra la selección ucraniana. "Sergio se encuentra bien. Ha completado los tres entrenamientos a gran nivel y aunque tiene alguna molestia propia de la lesión que ha sufrido estará listo para el partido", ha explicado Del Bosque, que ha destacado la trascendencia del encuentro: "No es que sea a vida o muerte, porque si es muy importante porque estamos en el ecuador de la fase de clasificación y un revés sería un paso atrás difícil de enmendar".

Los laterales, en alerta

Los jugadores, según el seleccionador, son conscientes de lo que hay en juego. Sobre todo los laterales, que han sido aleccionados sobre los ucranianos que llevan el peso ofensivo de su equipo, los volantes Yarmolenko, del Dinamo Kiev, autor de tres goles ante Luxemburgo en su último partido de clasificación, y Konoplyanka, del Dnipro.

Iniesta, por otra parte, se ha mostrado un poco harto de la controversia en torno a los pitos al himno que presuntamente se producirán en la final de la Copa del Rey, que finalmente se disputará en el Camp Nou el 30 de mayo. "No soy amigo de las polémicas. Lo único que quiero es que la gente disfrute y exprese lo que tenga que expresar. No hay más que decir", ha señalado el centrocampista del Barça, que el miércoles había declarado en la Cope que el himno español debe ser respetado.