La campeona olímpica Ruth Beitia disputará este sábado su séptima final de altura en unos Europeos bajo techo y luchará por obtener su sexta medalla en un torneo que ya le ha dado un oro, tres platas y un bronce.

La atleta cántabra necesitaba una marca de 1,93 para acceder a la final. Empezó a saltar con la barra en 1,86, altura que superó a la primera, igual que los 1,90. No tuvo que volver a saltar, porque solo 8 atletas pudieron con esa altura.

Este sábado, a las 16.30 horas, Beitia, segunda en el ránking mundial del año con 1,98, competirá por una nueva medalla. Su mejor resultado fue el oro de Gotemburgo 2013. Entre sus rivales no estará la polaca Kamila Licwinko, campeona mundial en sala en 2013, que quedó eliminada en 1,86. Su máxima rival será la lituana Airiné Palsyte, líder del año con dos metros justos.

Beitia, que busca su 15ª medallas en un gran campeonato, ha hecho honor a su fama de buena competidora, y con solo dos saltos se ha metido en una nueva final, la 29ª de su carrera deportiva en 34 calificaciones.

MÁS FINALISTAS

La jornada de este viernes ha visto también el pase a las finales de los dos siguientes de varios españoles. Es el caso del triplista Pablo Torrijos, que podrá defender la medalla lograda hace dos años enPraga (una plata) en la final del domingo (16.04 h.) gracias a una gran calificación. Se pedían 16,60 y al primer intento el castellonense ya ha saltado 16,77, su mejor marca del año, cerca ya de su récord español 'indoor' de 17,04 establecido precisamente en la capital checa.

Otra final del domingo, la de 3.000 metros hombres, tendrá también presencia español, en esta caso por partida doble. El subcampeón europeo al aire libre de 5.000, Adel Mechaal, se ha metido al ser cuarto en su semifinal, el mismo puesto que ha ocupado el jovenCarlos Mayo (21 años) en la otra semifinal. Jordi Torrents se ha quedado fuera.

El 1.500 de este sábado (20.18), en cambio, solo tendrá un español, el catalán de Tortosa Llorenç Sales, que se ha metido con el último tiempo de la repesca. Sergio Paniagua no ha entrado, y tampoco lo ha hecho el reciente campeón estatal, el azulgrana Marc Alcalà, que se ha parado al principio al oír un segundo disparo (señal de salida nula) y ha pagado muy caro ese momento de incertidumbre, ya que no ha podido conectar con el grupo delantero en toda la carrera.