No podía ser de otra manera. La conferencia de prensa previa a uno, a otro, al más cercano, puede que también a uno de los más decisivos partidos del año, el Valencia-Barça de hoy (20.45 horas, Movistar Partidazo) en el viejo Mestalla, giró alrededor, no de la renovación, pues ya había firmado y estaba cobrando con su nuevo contrato, sino de la estampación ¡por fin! de la firma de Leo Messi junto a Josep Maria Bartomeu. Es evidente que Ernesto Valverde, que desde que empezó el ruido de verdad («a veces, tantas preguntas sobre el tema te preocupan, pero yo estaba muy tranquilo»), siempre dijo que lo más importante es que él, el Barça y sus compañeros tenían a Messi para ayudarles a ganar partidos y que lo demás, es decir, la firma, la foto, ya llegaría.

Y cuando empezó la conferencia, nada del Valencia, que fue casi, casi, el postre. «Pues sí, estoy feliz por esa foto y esa firma, pero más lo estoy porque este asunto se ha cerrado ya, felizmente, y sin duda dará tranquilidad al entorno, a la familia blaugrana y a todos nosotros. Pero yo estaba tranquilo, pues veía a Leo sonreír y muy feliz de seguir con sus compañeros. Cada vez que pienso que cuando acabe este contrato llevará 21 años en el Barça, creo que es el lugar ideal para que Leo se desarrolle y disfrute».

CENTRALES ZURDOS / Mientras se salpicaban algunas preguntas como esa obligación de que en Mestalla deban jugar dos centrales zurdos («cuando son dos derechos, nadie se lo plantea; confío en Umtiti y Vermaelen») o sobre el tremendo contragolpe del Valencia («habrá que estar muy atentos a las pérdidas de balón, pues ellos tienen el que creo es el mejor contragolpe de la Liga»), Valverde siguió respondiendo a preguntas sobre Messi, su juego, su influencia en el Barça y sus momentos estelares. «¿Que momentos recuerdo? Así de sopetón, sin pensar, el gol que nos metió, siendo yo técnico del Athletic, en la final de Copa, el gol al Getafe, aquel de cabeza en la final de la Champions de Roma al Manchester United...».

Valverde admitió que no había nada más placentero que entrenar al mejor jugador del mundo. «Se trata de un experiencia única porque, a menudo, o siempre, los jugadores suelen tener que adaptarse al entrenador pero, en el caso de Leo, yo creo que también el entrenador debe adaptarse al jugador y es un placer prepararle a él. Valoro muchísimo tenerlo en la plantilla».

El Txingurri insistió, al margen de Messi, la importancia del partido de hoy ante el Valencia, aunque «no decidirá nada porque queda aún mucha Liga y mucha temporada». El tecnico vasco destacó el trabajo de Marcelino. «Es un gran entrenador y dispone de una excelente plantilla y una afición muy futbolera».

En definitiva, los equipos que presentan mejor estado de forma en lo que va de campeonato miden hoy sus fuerzas. El Barcelona tratará, con la relajación de la firma, de impedir que el Valencia se le acerque en el liderato.