Miró arriba cuando las señales apuntaban hacia abajo y ahora Albert Ferrer es entrenador de un equipo que está en lo más alto del fútbol, en la mejor liga del mundo. Y de momento no le va mal, aunque con matices. Un solo partido saldado con una derrota dulce porque al fin y al cabo caer en el Bernabéu entraba dentro de "lo normal", como dijo ayer el catalán, pero el equipo dio buena imagen que ha generado cierta euforia entre la afición. Algo que también palpa Ferrer y sus jugadores. "Tampoco quiero que ahora, con la sensación que tenemos de Madrid, se piense que cualquier partido que no sea contra Barcelona o Madrid vamos a ganar tres o cuatro a cero, porque no va a ser así, pero aún así estoy convencido de que podemos ganar".

No hay miedo

"No tememos a nadie, pero sí le tenemos respeto", subrayó el técnico, quien es consciente de que el Celta llega en mejor momento al tener una pretemporada más larga. En su análisis del rival, Ferrer ha destacado que Berizzo "ha sabido aprovechar lo bueno que dejó Luis Enrique y le ha añadido conceptos de Bielsa", con el que el argentino fue al Mundial de Sudáfrica con la selección chilena en calidad de segundo entrenador.