El Rayo Vallecano, próximo rival del Córdoba (este domingo a las 20:00 horas) logró la salvación matemática la pasada jornada, gracias a un empate in extremis en Zaragoza (Embarba marcó el empate a uno en el minuto 93).

Sin embargo, ello no ha supuesto la paz social en el club madrileño, convulso por un enfrentamiento entre una afición especialmente reivindicativa y una mayoría accionarial en torno a Raúl Presa, que se niega a vender el paquete mayoritario que posee.

Ayer se celebró la Junta de Accionistas del Rayo Vallecano, polémica por varias cuestiones. En primer lugar, se impidió el paso a los medios de comunicación, que tuvieron que conformarse con seguir por Twitter la información y fotografías que colgaban los accionistas minoritarios.

Precisamente la asociación que los engloba, ADRV Accionistas, trató de comprar las acciones de Presa para repartirlas entre los socios y aficionados del Rayo, pero el presidente se negó a tal extremo.

Ante la mayoría accionarial de Presa, se aprobaron todas las cuestiones de la Junta (cuentas, renovación de cargos, informes de gestión, etc).

ENTRENAMIENTO CON VARIOS TOCADOS

Mientras, en la mañana de este miércoles la plantilla del Rayo ha vuelto al trabajo con varias novedades, ya que Diego Aguirre, Claverías, Jean Jules y Sergio Akieme entrenaron separados del grupo, por molestias físicas.

Joni Montiel, por su parte, lo hizo con un grupo que se ejercitó en cuestiones físicas, con trabajo de reactivación, así como con ejercicios de posesión y presión a campo completo, con la mente puesta ya en el trabajo táctico para contrarrestar las virtudes del Córdoba.