La cantante cordobesa Susana Raya ofrece esta noche una actuación en el Teatro Góngora, dentro de la programación del Festival Qurtubajazz, en la que presentará ante sus paisanos su último disco, Rosa de los Vientos, un título sugerente «que expresa lo que la música significa para mí, es mi guía, mi orientación, ella me lleva y me trae y siempre hace de mí lo que quiere», asegura la artista. Este disco ha sido producto de la autogestión y, a través de crowdfunding, la cantante ha conseguido grabarlo en Nueva York con músicos de primer nivel y «tiene un sonido cercano al folk americano», continúa la cantante, que señala que para ella ha sido «un reto» y, aunque con el tiempo «se va adquiriendo madurez y confianza en ti misma, ponerte ahí impresionaba mucho, pero finalmente resultó estupendo y nos lo pasamos muy bien grabándolo».

Susana Raya estará acompañada en el escenario por cinco músicos, dos de ellos llegados de Amsterdan, lugar donde ha fijado su residencia desde hace algunos años la cantante, y también de Málaga, además de la colaboración de la música y cantautora cordobesa Gloria Ariza, «que tiene una trayectoria parecida a la mía y estará en los coros y a la guitarra». En cuanto al repertorio, además de desgranar las canciones de Rosa de los Vientos, interpretará una canción «en un idioma desconocido que los espectadores tendrán que adivinar», porque «la música tiene esas cosas que te vas encontrando, es como un viaje en el que vas hallando pequeños tesoros».

PUESTA DE LARGO \ Este concierto será un anticipo del lanzamiento oficial del disco, que tendrá lugar en diciembre, por lo que será la puesta de largo de este trabajo, que se presentará en sexteto, «que es como tiene que sonar». Respecto al Festival Qurtubajazz, la cantante opina que este encuentro es muy necesario «para dinamizar el sector del jazz, el contacto con todos los que intervienen en el proceso, desde los artistas y los programadores a los medios de comunicación, porque todos nos necesitamos», asegurando que «el jazz tiene futuro, es una música que jamás va a morir, que evoluciona, que se fusiona con muchas músicas y siempre va a tener su publico, lo que hacen faltan son citas como esta para acercarlo a todo el mundo, sobre todo a la industria, a la comercialización». Aunque no está nerviosa ante su actuación de hoy, sí confiesa que tienen que controlar sus emociones, porque “hay canciones en este disco que tienen que ver mucho con Córdoba», como Camino a casa, que habla de la calle Alfaros y evoca los lugares donde la cantante dio su primer concierto o compró su primera guitarra, y también de las plazas y fuentes de su ciudad.

«Cuando me fui a grabar a Nueva York, en el ipad tenía fotos de Córdoba para explicarle a los músicos las canciones», continúa la artista, que no baraja la posibilidad de volver a vivir en Córdoba «por ahora». «En Amsterdan tengo trabajo como profesora de música y allí hay más ambiente musical y movimiento cultural que aquí», concluye la cantante, que hoy mostrará a los cordobeses un trabajo forjado en la capital holandesa, pero que tiene «sabor a Córdoba».