Apenas unas horas antes de partir rumbo a Barcelona, donde actuará hoy en el teatro Liceo, el violinista cordobés Paco Montalvo habla con entusiasmo de este concierto, en el que ofrecerá algunas novedades respecto al espectáculo en torno al violín flamenco con el que ha viajado por numerosos países, además de por toda España. Según relata el joven músico, «a medida que se va desarrollando la gira, el montaje va cambiando», eligiendo temas diferentes «para sentirme vivo y no repetir siempre lo mismo», por lo que a Barcelona llega con «muchas novedades».

Según señala el artista, el espectáculo de esta noche comenzará de una forma íntima con el solo de guitarra de la Guajira flamenca, dando paso después en el escenario a Montalvo para dar forma a un diálogo entre el violín y la guitarra. Tras esa conversación, entran las palmas, el cajón y el bajo, para culminar con la llegada de la bailaora, Marta Guillén, aumentando considerablemente el ritmo del primer número. A partir de esta declaración de intenciones, el violinista y su cuadro darán rienda suelta a las bulerías, tangos y alegrías, hasta completar prácticamente todos los palos del arte jondo. «Me gustan los contrastes, y es muy importante cambiar el ritmo», dice Montalvo, que explica que durante su actuación pasa de temas más melódicos a otros más enérgicos con el objetivo de que «el público no pierda nunca la atención». Pese a que no es el primer escenario emblemático que pisa, esta actuación es «muy importante» para Montalvo.