El músico y lutier argentino Pablo Nahual ofreció ayer en el Palacio de la Merced el primero de una serie de conciertos didácticos, para más de un millar de escolares, basado en la educación emocional como herramienta de aprendizaje. Algunas de las sesiones contarán con una intérprete para niños con deficiencias auditivas, con la finalidad de que éstos puedan participar en la actividad musical y disfrutar de la misma.

A través de instrumentos étnicos traídos de comunidades indígenas, considerados piezas de museo por la dificultad de encontrarlos hoy en día, los alumnos conocerán y escucharán la sonoridad de los instrumentos del hombre prehistórico, comprendiendo así el origen de los instrumentos actuales y la universalidad de la expresión artística en cualquier época de la historia de la humanidad.

Esta actividad se presenta dentro de un proyecto de innovación educativa, que emplea la música como herramienta clave en la educación emocional. "El recorrido por la historia de los instrumentos es el hilo argumental del concierto, que está íntimamente ligado al currículo escolar de los niños, pero la finalidad del mismo no es absolutamente intelectual, ya que la actividad está pensada para llamar a las emociones y trabajar estados anímicos, favoreciendo con la música el desarrollo personal de los niños en un entorno lúdico-cultural", explica el músico.