El escritor Manuel Vilas presentó ayer en Córdoba su última novela, El luminoso regalo (Alfaguara) con la que, según explicó, espera "recordar a la gente que el sexo es una cosa de enorme complejidad y actúa directamente sobre nuestra existencia, nuestra soledad, nuestro sentido de la felicidad, la plenitud, etc". En este sentido, los dos protagonistas de esta historia (un escritor de éxito y una mujer que se convierte en su reflejo) viven el sexo con dificultades y de una forma ilimitada, y el autor confiesa que la obra "es muy exhibicionista", lo que le ha llevado a observar a través de la reacción de sus lectores que "en España todavía no es posible hablar de sexo en profundidad, algo que me alarma profundamente".

En este trabajo Manuel Vilas ha dado un giro a su narrativa pasando de un estilo postmoderno a otro más clásico, en el que se ofrece al público un planteamiento con nudo y desenlace para resolver la historia. Así, el escritor plantea una trama sobre "el erotismo actual, que tiene mucha relación con el capitalismo y con la idea de la codicia", lo que en su opinión también se traduce "en la acumulación de coitos, orgasmos, sexo de todas clases y su exhibición pública". No obstante, asegura que no comparte esta visión "banalizada" del sexo y esto le ha llevado a definir unos protagonistas que "buscan en el sexo el misterio y el origen de lo que somos como especie". Un retrato que para el escritor Mario Cuenca Sandoval, que presentó ayer la novela junto a su autor, plasma una visión "aterradora" sobre el personaje principal y su problema de adicción.

ACTIVIDADES // Además de esta actividad, el público de la Feria del Libro también pudo conocer ayer la monografía José Díaz, una vida en lucha (Almuzara), en la que el historiador Alejandro Sánchez Moreno aborda la trayectoria de este exsecretario general del PCE. El autor ha explicado que con este trabajo pretende situar en el lugar que le corresponde a esta figura de la política, que antes de fallecer en el destierro (en Rusia) tuvo que enfrentarse a las directrices marcadas por Stalin para defender las medidas que deseaba tomar en España en los años de la República y, después, tras la Guerra Civil.

De este modo, Sánchez Moreno precisa que José Díaz "se negó a que el PCE abandonara el Gobierno de la República" y también "fue el primero en impulsar un frente popular en España en contra de la decisión de Moscú", que en aquellos momentos seguía una estrategia diferente. Después de conocer estos y otros hechos, el historiador se preguntó "cómo puede ser que una persona que llegó a ocupar tan alto cargo de responsabilidad haya sido obviado por la historiografía", y a partir de esta idea desarrolló un trabajo con el que esperaba superar "las visiones hagiográficas y de la literatura anticomunista". El libro fue presentado por Manuel Pimentel, director de Almuzara, quien precisó que su publicación "aporta muchísimo", porque José Díaz fue, junto a la Pasionaria, "los dos grandes líderes del PCE en aquel momento".

La feria también fue escenario ayer de la presentación, por parte de Manuel Gahete, del libro Bajo racimo de uvas rojas (La fragua de metáforas), realizado por José Cañuelo Calero y Laura Ariza; y el programa de actos recogía, asimismo, la intervención de Javier Fernández en Memorias de una gaviota coja (de la misma editorial), obra de Isabel Serrano y Almudena Castillejo. Los asistentes a esta jornada de literatura contaron, además, con una iniciativa para el público infantil y otras firmas de libros entre las que se habían anunciado Sex--habilidad social (Séneca), de Vicente Cornejo; Conocer Córdoba (G.E.U.), de Pepa González; Nosocomio: el diamante negro (En huida), de Tania Padilla Aguilera, y Guardianes de lo humano (El Páramo), de Miguel Luque.