El actor y humorista Manu Sánchez hace doblete estos días en Córdoba, donde mañana y el viernes pondrá en escena su último espectáculo, El buen dictador, y ayer, junto al periodista Jesús Vigorra, presentó en La República de las Letras su libro Surnormal profundo, donde, siempre con humor, pone sobre la mesa el concepto de «surnormalidad», precisamente «para no tener que andar crónicamente reivindicando el Sur», dándole la acepción de «más allá de la normalidad». «Desde fuera nos intentan convencer de que el Sur es una cosa exótica, y quizá debemos empezar a querernos más desde dentro y reivindicar la surnormalidad».

«No fue fácil con la editorial poner ese título», confesó el humorista, que pretendía ser «provocador», siempre «sin molestar a nadie que no quisiéramos molestar». En esta ocasión, Manu Sánchez se pone algo más serio y profundo, tanto que casi parece «un desnudo integral», aunque, matiza, «lo de serio no tiene nada que ver con lo triste», y «las cosas se pueden hacer como las hacemos aquí en el Sur, de una forma muy seria y rigurosa, pero muy alegre», algo que muchas veces desde fuera «nos intentan afear».

Pese a la alegría que se desprende del libro, Sánchez asegura que el humor «no disfraza los problemas», pero es «una herramienta de supervivencia» y «nos ayuda a sobrevivir y a enfrentarnos a las cosas complicadas».

En el libro se habla de temas como el terrorismo, el machismo o la insolidaridad territorial, todos ellos asuntos «que parece que fueran incompatibles con el humor, aunque yo defiendo que es una forma que cristaliza la libertad de expresión, que tiene su secreto en la puntería», asegurando que, por ejemplo, «a mí me encontraréis en la trinchera de las víctimas y haciendo bromas contra los terroristas». Durante el acto, el humorista, que ha reunido en esta obra sus columnas radiofónicas, estuvo acompañado por Jesús Vigorra, que señaló que este libro es el de «alguien muy valiente defendiendo la Andalucía en la que cree», luchando contra los tópicos que «tanto daño nos han hecho». «Aquí vamos a ver otra cara de Manu Sánchez», continuó Vigorra, que destacó la reflexión que hace «sobre lo que le duele de Andalucía» sin «morderse la lengua», confesando que el actor «se me ha revelado como una persona que, tras la risa, guarda mucha reflexión».