La Escuela y el Festival internacional de Música Presjovem fueron clausurados ayer con un concierto en la Mezquita--Catedral que, como en años anteriores, tuvo un éxito total de público. En este sentido, la presidenta de la entidad, María José Baum, ha afirmado que además de esta velada de despedida la respuesta obtenida en el conjunto de los recitales "ha sido maravillosa" y han logrado reunir a más de 5.000 asistentes en sus once conciertos.

Baum ha destacado que "no nos había pasado nunca" que todas las actividades tuviesen un lleno absoluto e incluso hubiese personas que permanecían de pie, por lo que asegura que "lo del público ha sido impresionante" tanto en los conciertos realizados por los alumnos como en los de los profesores. Así, ha recordado que los músicos que han participado en la 23 edición han sido "de talla internacional", y entre estos se han encontrado Benedicte Palko, Daniel del Pino, Miguel Angel Ortega, Oscar Martín, Stefan Schmidt y Tíbor Szász en piano. En el área de violín, los alumnos han contado con la formación de Alfredo García, Anna Reszniak, Charles Bingham, David Delgado y Olga Vilkomirskaya; en la parte de viola se había anunciado la participación de David Quiggle y Jennifer Stumm, y en violonchelo, la de Suzana Stefanovic y Johanna Helm, mientras que este año también han acudido los contrabajistas Diego Zecharies y Rubén Fornell.

Este último dirigió ayer la Orquesta Presjovem en el concierto de clausura del festival, en el que interpretó obras de Holst, Mozart y Tchaikovsky, con la actuación de la pianista solista Esperanza Martín (antigua alumna de la escuela). En esta línea, María José Baum ha destacado que los cuarenta alumnos de esta iniciativa "trabajan mucho, tienen jornadas de 12 y 14 horas", y ha apuntado que después de ver los resultados obtenidos "estoy muy satisfecha con la edición del 2013". En referencia a la labor formativa realizada en las instalaciones del Castillo de Maimón (en el barrio del Naranjo), Baum ha recordado que los estudiantes llegan a Córdoba tras haber superado un proceso selectivo, ya que Presjovem "es una escuela de alto rendimiento de música y es la única que existe en el país", y ha añadido que, a pesar de que muchos son menores de edad e incluso niños, "todos tienen claro que se quieren dedicar profesionalmente a la música".