El hecho de que Medina Azahara esté más cerca de alcanzar el título de Patrimonio de la Humanidad llena de satisfacción a su director, que defiende como a un hijo a este conjunto arqueológico que "siempre sorprende" y "nunca defrauda" y considera que este apoyo unánime significa un reconocimiento a una labor de largos años.

--¿Qué cree que puede suponer el título para Medina Azahara?

--Creo que sería el relanzamiento a nivel internacional del conjunto arqueológico y cuando se consiga será el momento en que Medina Azahara se sitúe en el lugar que le corresponde.

--Si obtuviera esta distinción, ¿en qué cambiaría su actividad? ¿Necesitaría más inversión?

--La forma de trabajar no va a cambiar, los protocolos de actuación en Medina Azahara están muy claros, se pueden ampliar y mejorar, pero tiene que haber una convergencia necesaria entre todas las acciones de la tutela, es decir, la protección, investigación, conservación y difusión. La hipotética declaración nos obligará a trabajar más y, evidentemente, a que haya más inversión. Eso siempre es un objetivo. Hay muchos proyectos en cartera y necesitan de esa inversión, pública o privada.

--¿Qué queda por descubrir en Medina Azahara?

--Queda el 90 por ciento por excavar y parte de la investigación en la parte excavada. Hay un enorme campo por recorrer. Expectativas siempre hay. Tenemos indicios de lo que queda por descubrir, aunque su cualificación habría que estudiarla. En todo caso, jamás defraudaría.

--¿Se está acercando Medina Azahara al ciudadano? ¿Cree que los cordobeses conocen y valoran el yacimiento?

--Creo que sí y sería interesante un estudio sociológico en torno a este tema. Es probable que los cordobeses no visiten con asiduidad el conjunto arqueológico, sin embargo, creo que forma parte del inconsciente colectivo, lo sienten suyo, y las visitas se demandan mucho.

--¿Cuándo veremos el Salón Rico?

--Es difícil de determinar porque, aunque se está trabajando a marchas forzadas, es una intervención muy compleja y sería muy comprometido decir una fecha. A mí me gustaría cuanto antes.