Un grupo de treinta niños de edades comprendidas entre los 6 y los 12 años se dieron cita ayer en el Museo Arqueológico para participar en una de las actividades con las que los centros de la Consejería de Cultura en Córdoba celebran el Día de Andalucía. Con el objetivo de profundizar en el rico legado cultural, patrimonial y artístico que posee Córdoba, los pequeños, la mayoría «clientes fieles» de estas iniciativas, participaron en un ameno y entretenido taller titulado Verde, blanco y negro, en el que se adentraron en la cerámica representativa del Califato Omeya. Y así, utilizando los colores de esta cerámica --verde, blanco y negro-- y sus motivos vegetales y geométricos, los niños y niñas decoraron su propio plato (o ataifor, como se denominaba en el siglo X). Pintura en mano y debidamente protegidos por sus delantales, los niños volcaron su creatividad en este taller, cuya elección no ha sido casual, ya que “manteniendo el juego cromático entre los dos colores principales, el blanco de la dinastía Omeya y el verde del profeta, propició a través de los siglos, el origen de la bandera de Andalucía», señaló el delegado territorial de Cultura, Francisco Alcalde, que acudió a conocer de cerca esta actividad.

Hoy, para celebrar el Día de Andalucía, habrá jornada de puertas abiertas en los centros de arte de la Junta, según explicó Alcalde, y mientras el Arqueológico volverá a abrir sus puertas a los niños con otro taller, en este caso denominado Diseña tu postal, el Bellas Artes propone una actividad pictórica en torno al pintor Antonio del Castillo y en Medina Azahara se ofrece una visita guiada dramatizada titulada El itinerario de un embajador.