Finalizados los ensayos que se han venido desarrollando en el polígono industrial El Blanquillo --donde se han reproducido las dimensiones de la plaza Mayor de Almagro-- todo está listo para que Fuenteovejuna inaugure, el próximo jueves, el Festival Internacional de Teatro Clásico de la localidad ciudadrealeña.

El trabajo continuará ahora en Almagro, hasta donde se desplazará un equipo formado por cinco personas y encabezado por el director de la puesta en escena, Angel Luis Martín, para dejar preparado el atrezzo y el vestuario, y realizar el montaje escenográfico, de luz y de sonido. De este modo, termina la cuenta atrás que comenzó en navidades y que hará realidad el deseo de Natalia Menéndez, directora desde hace cinco años del festival de Almagro, quien considera la asistencia mellariense como "un hecho fuera de la comparativa profesional, pero que conlleva un gran trabajo y es de una gran envergadura, al ser un Lope", subraya.

Será la primera vez que la obra se represente en la prestigiosa muestra de teatro clásico, un hecho de especial relevancia para el director, que considera que "toda persona que nace en Fuente Obejuna recibe una herencia de Lope, que supone el compromiso de denunciar toda vejación que sufre el ser humano y transmitirla a otras generaciones". Se trata, según el director, de temas vigentes, que podrían llevar a pensar que "todo el movimiento del 15 M, se apoya en Fuenteovejuna" y a preguntarse "¿quién no ha sufrido una injusticia en su vida?" y que se plasman en la representación, al igual que la de la mujer como defensora de derechos, "que la pone Lope, no yo, pero que voy a marcar esa impronta en escenas". Para Martín, "el teatro es un reflejo de la sociedad" y desea que "se entienda que sigue estando el espíritu que Lope introduce yque podemos hacer cosas a través de la unión de la gente".

Dirigir Fuenteovejuna supone para el director "una emoción muy grande, pero viene a ser contenida" y a nivel particular "me quedo con que la gente que hace Fuenteovejuna , haya confiado en mi. Ese gesto me llena de orgullo y de agrado porque como decía antes, tengo el compromiso de transmitir esa herencia".

Ciento cuarenta y seis personas participarán en la puesta en escena de una hora y treinta y cinco minutos de duración, a la que asistirán numerosos mellarienses, que se desplazarán en varios autobuses a Almagro.