El legendario pianista y cantante Antoine Fats Domino, considerado uno de los padres del rock and roll en la década de 1950 y 1960, falleció la noche del pasado martes a los 89 años de edad en Nueva Orleans (EEUU), informaron ayer sus familiares. Domino, autor de éxitos como Blueberry Hill y Ain’t That a Shame, vendió más de 65 millones de discos a lo largo de su carrera, y recibió un Grammy en 1987 por su trayectoria. El fallecimiento fue confirmado por su hija, quien explicó que el mítico músico estuvo acompañado hasta el último momento por sus amigos y familia en Nueva Orleans. Durante la década de 1950, Domino encabezó las listas de números uno de Estados Unidos con su característico rhythm and blues, y solo fue superado por Elvis Presley. Su debut en 1949, The Fat Man, compuesto junto con Dave Bartholomew, es el primer disco de rock and roll que vendió más de un millón de copias.

Sus composiciones marcaron una época, y músicos como el propio Presley o John Lennon y Paul McCartnety le han citado como una de sus principales influencias. En 1964, The Beatles acudió a Nueva Orleans para dar un concierto, y sus componentes aprovecharon la ocasión para conocer a Domino.

El músico, además, fue uno de los diez primeros músicos incluidos en el Salón de la Fama del Rock and Roll en el año 1986, en un grupo en el que también estaban legendarias figuras como Chuck Berry, Buddy Holly y James Brown. En la década de 1970, el músico dejó de grabar discos, pero siguió dando conciertos hasta mediados de la década de 1990, y no abandonó nunca su ciudad natal, Nueva Orleans, donde sobrevivió al huracán Katrina en 2005, que arrasó gran parte de su barrio. En la serie de la HBO Treme mostró, en una escena, el interior de su casa, situada en un barrio popular del Lower 9th Ward, interpretando precisamente Blueberry Hill.

Domino convirtió el rhythm and blues pasado por la influencia del boogie-woogie en una de los elementos fundacionales del rock & roll. A lo largo de su carrera, ha llegado a vender más de 110 millones de copias de sus grabaciones. Según algunos expertos, The Fat Man, compuesta en 1949 junto con Dave Bartholomew, sería la primera grabación que mostraría las características de lo que más tarde llegaría a ser definido como rock & roll. Entre sus mayores éxitos, además de los título ya mencionados, también figuran canciones como, Whole Lotta Loving, ‘Blue Monday’ y Jambalaya.