LUGAR DE NACIMIENTO CORDOBA.

TRAYECTORIA SE LICENCIO EN LAS ESCUELAS DE BELLAS ARTES DE SEVILLA Y BARCELONA. EN ESTA ULTIMA UNIVERSIDAD FUE PROFESOR DE PINTURA, ACTIVIDAD QUE POSTERIORMENTE DESARROLLO EN LA ESCUELA DE CORDOBA. HA EXPUESTO EN DIVERSAS GALERIAS ESPAÑOLAS.

--¿Qué aporta su exposición antológica que se celebra estos días en Lucena?

--Fue un proyecto del Ayuntamiento de Lucena. Vinieron a pedirme la antológica. Me gustó el local y lo hice. Se ha editado un magnífico catálogo. Muestro obras desde que tenía 17 años hasta la actualidad. La exposición ha sido comisariada por Jaime Jurado, que la ha dividido en cuatro etapas: una de formación, otra de iniciación personal, otra intermedia y una última etapa que va desde el año 80 hasta la actualidad. De modo que ellos me ofertaron la muestra y acepté porque me parece tan digno hacerlo en la provincia como en la capital, porque aquí no se mueve una hoja.

--¿Cómo se puede ver allí el desarrollo de su pintura?--Está elocuentemente expuesto en esta muestra y dividido en esas cuatro etapas, con imágenes y textos de cada época, de modo que encaja el momento histórico de esos trabajos a través de esos momentos.

--¿Cómo se ha desarrollado su trayectoria?--Ha sido coherente dentro de lo que hago. No he perdido la figura humana. Hay temas de la primera etapa de denuncia social, de suburbio. Hay una búsqueda con inmersiones en el surrealismo. Luego vuelvo a la figuración de manera rotunda. Están los temas del asilo de Buen Pastor con un matiz social.

--En sus obras se ve la Córdoba de posguerra como un tema constante. ¿Por qué?--Me parecía real la situación social que había respecto a lo que se vivía en otros países. Yo viajaba a Francia y veía una sociedad distinta, pero aquí la posguerra seguía durante años. A mí me interesaba por encima de todo el mundo cerrado de los niños. El cambio brusco está en el dibujo titulado Carmen . A esta señora la pinté en el asilo y se murió mientras posaba para mí. Luego salto a la interacción del espacio plástico del realismo. A través de la curva llevo y traigo imágenes de clases sociales y del pasado al presente.

Carmen

--El tema de la infancia se hace casi obsesivo. ¿No?--En el mundo cerrado de los niños, los adultos no podemos entrar. Ellos tienen su pensamiento. Hice una exposición en Ocre en el año 92. Retrato todo el mundo infantil. Me atrae la nobleza, la inocencia del ser humano.

--Cultiva el dibujo en una época en la que no se emplea demasiado.--Creo que el dibujo es una materia vital para elaborar cualquier idea. Un trazo representa la realidad. El dibujo desde el Renacimiento hasta ahora se ha caracterizado como un medio de estructurar un cuadro.

--¿Y el grabado?--Me lo prohibieron los médicos cuando tuve aquella grave enfermedad del hígado. Se hizo una muestra en el Museo Nacional de Grabado Contemporáneo y me eligieron entre los veinte mejores, pero tuve que dejar de grabar porque los disolventes y ácidos son perjudiciales. En mis dibujos y grabados descargo muchos pensamientos. Hago un tipo de dibujo similar al grabado, donde no se puede borrar nada. Los condicionantes del grabado me han llevado al dibujo sobre tabla con unas cautelas propias de la calcografía.

--El realismo está mal visto por las jóvenes generaciones. Sin embargo es, por otra parte, muy apreciado y valorado. ¿Cómo ve esta paradoja?--El arte no es figurativo o no figurativo. El arte está por encima de todos los istmos y tendencias. Que las ideas se entiendan a través de la figuración es una manera de darle forma al pensamiento. ¿Qué peligro tiene la figuración para que no se muestre? El Museo del Prado está lleno de ella y la gente va allí a ver arte figurativo. Alguna razón habrá. Es un modo de expresión del arte.

--¿Y su etapa de profesor cómo le fue?--Dejé esa etapa por la enfermedad. Comencé dando clases en la Facultad de Bellas Artes de Barcelona, como profesor de pintura. Luego me contrataron en San Fernando, pero definitivamente me quedé en Córdoba. Me presenté a las oposiciones y obtuve el número uno y ya permanecí en la Escuela de Artes Aplicadas cordobesa.