Alfonso Sánchez y Alberto López parieron en el 2012 una película humilde, puro cine de guerrilla al margen de la industria. Se empeñaron hasta las cejas para sacar adelante la tronchante historia de un atraco a un banco en plena Semana Santa andaluza. La titularon 'El mundo es nuestro' y si Tarantino hubiera rodado 'La estanquera de Vallecas' le habría salido algo parecido. Triunfaron en el festival de Málaga, donde la prensa se rindió a sus pies. Pero el fin de semana que aterrizó en las salas comerciales el batacazo fue descomunal.

Solo 6.000 espectadores pagaron por ver la película. Sánchez y López cogieron el toro por los cuernos. Bajaron el precio de la entrada a dos euros y, megáfono en mano, se recorrieron su tierra natal -Andalucía- para animar al público a meterse en el cine. 'El mundo es nuestro' es hoy una película de culto (así lo sentencia hasta el 'Hollywood Reporter') y Sánchez y López, dos cómicos de éxito ('Ocho apellidos vascos') que llenan teatros con sus personajes de Rafi y Fali, dos andaluces españoles a morir, defensores de las viejas costumbres y rancios en el vestir. Dos tipos con los que llevan años arrasando en YouTube y en los teatros y que ahora saltan a la gran pantalla con 'El mundo es suyo'. Presentada en la sección oficial de Málaga, la película es un canto al hermanamiento masculino, una comedia alocada que apunta a taquillazo. Se estrena en junio de la mano de la 'major' Warner.

DOS CRETINOS ENTRAÑABLES

Rafi y Fali son dos señoritos sevillanos. Dos cretinos entrañables. Dos compadres. Dos niños grandes que visten como nuevos ricos y para los que Sevilla (y lo español en general) es lo más grande. "Es una comedia. Nos reímos de lo que somos. Pero, en realidad, la película esconde un drama: la crisis del modelo masculino del macho ibérico", afirma Sánchez, que también es el director y el coguionista.

A pesar de tener una producción al uso y una 'major' como Warner a sus espaldas, la pareja de cómicos asegura que no han renunciado a la absoluta libertad con la que rodaron su primer filme, artesanal, fresco y transgresor hasta decir basta.

OBJETIVO: TAQUILLA

'El mundo es suyo' -que ha costado seis años de trabajo- es humor alocado. Repleto de gags sobre tópicos andaluces, el guion está escrito e interpretado para provocar risas y arrasar en taquilla. Conscientes de los tiempos de corrección política que vivimos, Sánchez y López recuerdan que los personajes a los que interpretan -torpes y machistas- son pura ficción. Que nadie se ofenda, pues. Ni siquiera los que llevan el cinturón con la bandera de España. "Somos el país de Berlanga, Azcona… grandísimos creadores que utilizaron el humor, que es la mejor manera para que el público reflexione sobre determinados temas. El humor es básico. Sin él, España habría chapado o estaríamos todos cantando fados", sonríe López.

Alfonso Sánchez (izquierda) y Alberto López, en un fotograma de 'El mundo es suyo'

Un festival de cine parece terreno más propio para películas sesudas e intensas, pero la pareja de cómicos pide una oportunidad a la risa. "Basta de prejuicios. Sería muy bonito que una comedia ganara los Goya un año", reivindica Sánchez.

Primero fue 'El mundo es nuestro'. Después, 'El mundo es suyo'. ¿Seguirá 'El mundo es vuestro'? Todo apunta a que sí habrá una tercera película. Sánchez y López no quieren avanzar nada porque todo depende del "sabio" público. "En la industria del cine hay que reivindicar la palabra comercial. Si esta película gusta a la gente y va bien en taquilla podríamos completar la trilogía". A ver qué pasa, pues, el 22 de junio.