Ya lo avisó el director del festival, José Luis Rebordinos, antes de levantar el telón de la edición número 64. El cine asiático viene fuerte. Dicho y hecho. El jurado ha otorgado la Concha de oro a una película de nacionalidad china: 'I'm not madame Bovary', protagonizada por una estrella planetaria, Fan Bingbing, actriz, cantante y productora de 35 años que llegó a San Sebastián rodeada de un séquito de 15 personas y exigiendo sesiones de maquillaje de tres horas. En Europa no la conocemos (por lo menos hasta ahora) pero en toda Asia su nombre es equiparable al de la mayor estrella de Hollywood. En su gigante currículo ya tiene un premio más: la Concha de plata a la mejor interpretación femenina.

UNA VIOLACIÓN

'I'm not madame Bovary' narra los 10 años de lucha burocrática que una mujer mantiene con la administración a cuenta de un divorcio falso. De momento, no tiene fecha de distribución en España. Lo que sí tiene es polémica. En un momento dado del metraje, la protagonista (irreconocible Fan Bingbing sin gota de maquillaje) se resiste a tener sexo con su novio. "No quiero, estoy cansada", alega. Pero la relación se consuma. "¿Te has dado cuenta de que ha sido una violación", pregunta ella. "¿Si? ¿Y cómo estás?", contesta él. "Mejor que nunca", zanja ella. El equipo del filme, con su director a la cabeza, Xiaogang Feng, achacaron el controvertido dialogo al "humor negro" que trufa todo el guion.

'THRILLER' DE DESPACHOS

Durante el festival, 'I'm not Madame Bovary' fue proyectada entre gritos fervorosos e histéricos de la comunidad china en San Sebastián. Sin embargo, la prensa acreditada mostró indiferencia. Todo lo contrario que ocurrió con 'El hombre de las mil caras', escogida por la Asociación de Informadores Cinematográficos de España como la mejor película del certamen (se llevó el Feroz Zinemaldia).

El jurado de San Sebastián también ha sabido ver la fibra cinematográfica de una película en la que el cineasta Alberto Rodríguez traslada a la gran pantalla uno de los episodios más delirantes de la historia reciente de España: el caso Luis Roldán. Tenso, abrumador, complejo y a ratos divertido, se trata de un 'thriller' político de despachos, protagonizado por trileros, mentirosos, agentes de espionaje que viajan con chequera y no con pistolas. El filme, que se estrenó el viernes y que está basado en el libro del periodista Manuel Cerdán, está protagonizado por un sobresaliente Eduard Fernández, galardonado con la Concha de plata al mejor actor. El barcelonés da vida a Francisco Paesa, el exagente secreto español más controvertido y la persona que colaboró tanto en la fuga de Roldán, exdirector de la Guardia Civil y saqueador de las arcas públicas, como en su posterior entrega al Gobierno.

'QUE DIOS NOS PEDONE', MEJOR GUION

El cine español, junto a la británica 'Lady Macbeth', levantó el nivel medio de una sección oficial de lo más normalita. Así que era de esperar que 'El hombre de las mil caras' no fuera la única cinta premiada. Efectivamente, el 'thriller' policiaco 'Que Dios nos perdone' (se estrena en octubre) consiguió entrar en el palmarés de la mano de un guión fibroso e intrigante que no solo retrata la búsqueda de un asesino en serie sino que dibuja una ciudad (Madrid) y las miserias de un sistema podrido. La Concha recayó en la manos de sus autores: el director Rodrigo Sorogoyen y la guionista Isabel Peña.

HONG SANG-SOO

El jurado quiso que los galardones fueran como la lotería de Navidad: muy repartida. Por eso, la Concha al mejor director fue a parar al coreano Hong Sang-soo, un habitual de Cannes y Locarno que en San Sebastián presentó 'Lo tuyo y tú', una juguetona ¿comedia? romántica solo apta para paladares ultracinéfilos. Admás, hubo dos premios especiales para la argentina-francesa 'El invierno' (también se llevó mejor fotografía) y la sueca-danesa 'The giant'.