El escritor y cineasta David Trueba pasó ayer por Córdoba con su última novela bajo el brazo. La librería Luque fue el escenario de la presentación de Blitz , un relato en el que el autor reflexiona sobre el paso del tiempo y cómo la diferente perspectiva que da la edad transforma también los sentimientos. "Es un cruce entre dos personas de muy distintos años y cuenta cómo las sensibilidades cambian y la gente busca detrás de la compañía o del amor cosas distintas", dice Trueba.

Blitz significa relámpago en alemán y el autor utiliza este término para hacer referencia a la "fugacidad de algunas cosas de la vida, que pasan a la velocidad del relámpago, pero también se agotan a esa misma velocidad". "Es como cuando uno hace recuento de su vida y quedan los cuatro o cinco relámpagos más intensos, tanto de felicidad como de desdicha", continúa el escritor. El inicio de la novela es el envío de un mensaje por error al protagonista del relato y, de alguna manera, delata que no es tan sólido el momento en el que vive. A partir de ahí se le desmontan todas las certezas y tiene que empezar de nuevo. Trueba ha intentado ser fiel con este título al efecto que quería causar con esta obra: "Quería que fuera breve y contundente en su desarrollo, y quiero pensar que vas creciendo, pero no pierdes lo que considerabas la gran virtud que podías tener, que es un punto de honestidad con respecto a lo que ves, a lo que sientes, y a seguir contándolo con la misma libertad y veracidad".

David Trueba ha vuelto a la novela siete años después de la última, Saber perder , pero durante todo ese tiempo no ha dejado de trabajar tras la cámara. "Yo no elijo el momento de escribir o dirigir, por lo general dejo que las cosas sean las elijan ese momento. Antes de que salga algo tiene que madurar y hay un tiempo en el que nace y luego se desarrolla buscando una presencia hasta el día que se hace imprescindible sacarlo, escribirlo o hacer una película", dice Trueba, que se acercó ayer a sus lectores cordobeses, algo que "me gusta mucho". "No sé si la gente me ve más como cineasta o como escritor", continúa el realizador, que cree que se le percibe siempre con la misma actitud. "Para mí la tarea es a largo plazo, no me interesan ni los éxitos ni los premios ni los reconocimientos, sino ganar a cada lector o espectador ofreciendo algo currado, que no apuntala una carrera, sino el deseo de comunicarme", concluyó Trueba.