ORQUESTA DE CORDOBA

Solistas: Raquela Sheeran (soprano) y Larry Passin (clarinete)

Dirección: Alexander Rahbari

Lugar: Gran Teatro

Fecha: sábado, 28 de febrero

La celebración del Día de Andalucía, por la Orquesta de Córdoba, concitó un gran lleno en el Gran Teatro el sábado pasado. La presencia del controvertido y simpático director Alexander Rahbari como invitado en el podio de la formación cordobesa y el atractivo programa previsto (aunque de poca relación con la efemérides) fueron notas determinantes en un concierto que se saldó con efusivos aplausos del público y un reconocimiento artístico alto. Aunque, de vueltas con el programa, integrado por obras de Beethoven, Debussy y el cordobés Lorenzo Palomo, más de uno se preguntaba si era el más apropiado para una fecha como el 28 de febrero, sobre todo cuando los demás programas de esta temporada llevan un título sobre el que gravita la confección de los mismos. Y más aún, cuando es tan abundante el repertorio de compositores andaluces o de obras relacionadas temáticamente con Andalucía, y cuando la propia Orquesta de Córdoba es una de sus más destacadas difusoras.

COMPOSITOR CORDOBES Pero, dejando a un lado lo que no pasa de ser una anécdota (contradictoria si se quiere con el sentido del concierto, por más que escucháramos al principio el himno oficial de Andalucía), habría que felicitarse por la inclusión de dos obras cimeras del repertorio sinfónico: el Preludio a la siesta de un fauno , con la fenomenal flauta de Wendela van Swol y un atrayente y exquisito color orquestal logrado por Rahbari, y la Sinfonía Heroica de Beethoven, menos lucida como conjunto pese a su correcta interpretación y buen ensamblaje. Pero la insuficiencia de la masa orquestal y, por ende, el solo relativo énfasis en los característicos contrastes de dinámica, junto a la peculiar visión del iraní en cuanto a tempi, carácter..., dieron como resultado una versión ciertamente correcta, pero algo alicorta en cuanto a la genuina expresividad que demandan estas páginas beethovenianas.

Y se completó el programa con los Cantos del alma de Lorenzo Palomo, partitura de ambiente sonoro en la onda del neorromanticismo germánico, con muy buena orquestación y notable riqueza temática, la cual disfrutó de la ejemplar actuación de la soprano Raquela Sheeran y del clarinetista Larry Passin, al lado de una orquesta en forma y motivada.