Un cineasta novel, un peluquero y estilista, un escritor y un colectivo que trabaja para la difusión del séptimo arte conformaron la representación cordobesa que subió el pasado sábado a las tablas del Teatro Lope de Vega de Sevilla, durante la entrega de los premios que otorga la Asociación de Escritores y Escritoras Cinematográficos de Andalucía (Asecan), con la colaboración de la Sociedad General de Autores (SGAE). Todos ellos recogieron un galardón que distinguía su labor en el mundo del cine durante una gala que se convirtió en la que mayor número de premios otorgó a la provincia de Córdoba desde que se celebra.

Aunque lleva en el mundo del audiovisual toda su vida y se ha consagrado como dramaturgo, guionista y director de escena, la película Las heridas del viento es el primer largometraje del montillano Juan Carlos Rubio, y con ella se alzó con el premio a la Dirección Novel. Para Rubio, las seis «importantes» nominaciones con las que partía su filme «ya suponían un gran premio para una película tan especial como esta». «Un director se puede poner al frente de un filme si tiene equipo y, en mi caso, el equipo está ahí», señala Rubio, que asegura que este galardón es «un premio a toda la película, a los que la hemos hecho y a los que apostaron por ella».

«Hay mucho talento en Andalucía», reconoció Rubio, que asegura que esta distinción no significa que vaya a cambiar las tablas por la cámara. «Yo vengo del audiovisual, siempre he caminado entre la tele, el teatro y el cine», recuerda Rubio, que subraya que «no tengo ningún plan de repetirlo, pero si surge un buen proyecto que merezca la pena, lo haré». Y es que Las heridas del viento «es un producto muy especial, que nace de un proyecto teatral que tuvo un gran éxito», por lo que no es «una película al uso, ya que hemos buscado el espíritu del montaje», que, como el filme, también estuvo protagonizado por los actores Kity Mánver y Daniel Muriel. «No hubiera habido película sin ellos», asegura el cineasta. Por otra parte, Rubio se muestra muy «satisfecho» y «optimista» sobre el momento que vive el cine andaluz.

«En Andalucía hay una creatividad muy potente e interesante desde hace mucho tiempo», dice Rubio, que subraya que «los premios Asecan se han ido consolidando cada vez más porque hay una producción muy importante. Se seguirá hablado del cine andaluz». «El teatro es efímero, pero el cine es la imagen, es un patrimonio cultural que pasea a Andalucía por todo el mundo, lo que supone un escaparate de primera línea».

Francisco Rodríguez Frías recibe su premio. Foto: BELÉN VARGAS / AFPICTURES

El que ya tiene tablas en estos premios es el peluquero y estilista Francisco Rodríguez Frías, que aún tiene que pasar los nervios de la gala de los premios Goya, para los que también está nominado por su labor en la película de Pablo Berger Abracadabra, que le ha valido el premio Asecan de Maquillaje y Peluquería. Después de alcanzar un premio del cine andaluz por Mi gran noche, de Álex de la Iglesia, el peluquero cordobés, que también tiene un Goya por Las brujas de Zagarramurdi, obtuvo un nuevo reconocimiento por «un trabajo maravilloso de documentación e investigación en mercadillos y distintos barrios con la intención de captar a gente con el look y las características que Berger buscaba para la película».

«Para mí, es muy emocionante y un orgullo que en mi tierra se siga, se valore y se premie mi trabajo», siendo su única «espinita» que «nunca he hecho una producción andaluza».

Manuel Lamarca muestra su trofeo. Foto: BELÉN VARGAS / AFPICTURES

También se vino para Córdoba el premio Asecan Libro de Cine de la mano de Manuel Lamarca, que ha sido premiado por la obra Jerry Lewis. El día en el que el cómico filmó (Ediciones Carena), construida bajo una visión objetiva y metódica, con una documentación rigurosa, pero que también está impregnado de pasión, amor y entrega personal. «Estoy muy contento, es una gran satisfacción», señala el escritor, que ya se ha adentrado varias veces en la literatura cinematográfica, aunque es su primer volúmen como único autor.

Miembros del colectivo Brumaria. Foto: BELÉN VARGAS / AFPICTURES

Por último, el reconocimiento a la Labor de Difusión del Cine en Andalucía ha sido para el Colectivo Brumaria de Fuente Obejuna, una asocaición que nació alrededor del 2005 en el IES mellariense. Está integrada por los profesores Miguel Sánchez, Roberto Salas, Javier Goytre y Javier Álvarez, que han recibido este galardón por la organización del festival Fuente Obejuna de Cortos FOCO. Para ellos, este premio supone «un reconocimiento a la labor de muchos profesores que creen que otra forma de educación es posible y al talento de nuestras alumnas y alumnos», haciéndolo extensivo a «todos los compañeros que trabajan para desarrollar la creatividad y el espíritu crítico de los estudiantes» y agradeciendo «la colaboración de las familias de los alumnos y al Ayuntamiento».