El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, valoró ayer la "honradez y laboriosidad" de los cuatro galardonados con las Medallas de Oro de la Ciudad --Joaquín Sabina, Raúl González, José Tomás y Paloma O´Shea--, que fueron los protagonistas de un multitudinario acto al que estaban invitadas unas 400 personas, y con el que se estrenaba por fin el nuevo y flamante patio del Palacio de Telecomunicaciones.

El cantante Joaquín Sabina bromeó con que "por una Medalla de Madrid merece la pena hasta madrugar" y definió a la capital como "el mapa del deseo, el terreno de sueños entre Babilonia y el Paraíso terrenal". "Yo fui un niño de provincias que soñaba con conquistar una ciudad que es fácil, porque se deja conquistar desde el momento en que pones un pie en Atocha", añadió el cantante, que hacia el final de su intervención tornó las bromas --"Sé lo difícil que habrá sido encontrar a quien hable bien de mí. Yo creo que ahí han funcionado los sobres"-- en una sincera emoción.