Impulsar la formación, la cualificación y dignificar las condiciones laborales de los profesionales del mundo del flamenco que carecen de titulación al no haber, hasta ahora, ningún modo de certificarlo profesionalmente, es el objetivo que persigue CCOO con el apoyo a la Escuela de Flamenco de Andalucía, que nace con el fin de convertirse en entidad de referencia en formación y divulgación de este arte.

El secretario general del sindicato en Córdoba, Rafael Rodrígue, reclamó ayer a la Administración andaluza "más atención" al flamenco, que calificó como el "mejor embajador de nuestra tierra en economías como la de China o Japón", ya que, en su opinión, la Junta "no está sabiendo aprovechar el potencial que este sector, como elemento diferenciador de nuestra cultura, podría tener para nuestra economía".

Carbonero denunció asimismo la alta precarización que sufren muchos profesionales del flamenco y la falta de reconocimiento oficial de sus aptitudes "al no haber ninguna modalidad formativa que así las certifique y les ofrezca la posibilidad de ponerle título oficial a su desempeño diario", afirma el sindicato en una nota. "No es lógico que el flamenco sea Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad y sus profesionales, que son quienes lo realzan y le dan prestigio, ni siquiera tengan un título que les certifique como profesionales en la materia".

Por su parte el presidente de la Escuela de Flamenco de Andalucía, Luis Guillermo Cortés, agradeció la colaboración prestada por parte del sindicato y su compromiso con la formación en esta materia, y ha reseñado que el fin de la Escuela es ser entidad de referencia. Los cursos se impartirán en todas las provincias andaluzas en módulos de 900 horas, siendo el centro cordobés el primero que ya está homologado, y habrá nivel inicial, avanzado y profesional.