El productor Fernando Vacas, el artista Francisco Contreras, Niño de Elche, y los músicos de Sonic Youth Lee Ranaldo y Steve Shelly se han unido para componer "Feliz Navidad", un villancico crítico que busca concienciar sobre la deshumanización de la sociedad y cuya recaudación irá a parar a una oenegé.

Vacas ha charlado con Efe en su estudio de Córdoba, donde ha dado los últimos retoques a esta pieza basada en una letra del artista cordobés Miguel Bocamuerta, que se podrá adquirir digitalmente en varios portales de descargas y cuyas ventas irán a parar íntegramente a Aldeas Infantiles.

En la línea de lo que hizo Tom Waits con la canción navideña en "Christmas Card from a Hooker in Minneapolis", Vacas ha querido darle una vuelta de tuerca al villancico tradicional, y lo ha hecho mezclando elementos tan aparentemente inconexos como la música del compositor György Ligeti, la voz flamenca de Niño de Elche, y las guitarras y la batería rockeras de Sonic Youth.

"Es un villancico en toda regla, que reclama y pone de actualidad el mensaje que Jesús trajo hace más de 21 siglos, que es la paz y la armonía. Y eso, ahora mismo, la única manera de lograrlo es haciendo que la gente reaccione", señala Vacas, que lleva un año y medio intentando cuadrar agendas para poner en marcha este villancico.

EN LA FRONTERA DEL FLAMENCO

Para ello, en su nueva incursión en las fronteras del flamenco, se vale del 'quejío' portentoso de Niño de Elche, que reflexiona sobre el mensaje de Jesucristo, a quien en la canción califican como "el loco más cuerdo, tanto que creyó ser el hijo de un dios", y fantasea con cómo sería su hipotética segunda venida a la tierra.

"Si vuelves a venir, yo te veo morir, en la silla eléctrica, en algún lugar de Norteamérica", canta Francisco Contreras sobre un martinete tribal de batería compuesto por Steve Shelly, y sobre un colchón de guitarras eléctricas aportado por Lee Ranaldo, a los que Fernando Vacas ha sumado guitarra española y palmas flamencas.

Vacas reconoce que pensó en Niño de Elche porque tenía "la fuerza y la posibilidad hacer suya" la letra de Bocamuerta, mientras que a Sonic Youth, uno de sus grupos fetiche, los "engañó" para colaborar trayéndolos a Córdoba y dejando que la ciudad hiciera el resto.

"A Steve Shelly y Lee Ranaldo se les quedó clavada la 'espinita' de la última colaboración con Morente. Desde entonces han estado muy pendientes de lo que es el flamenco, y cuando han tenido la oportunidad de demostrarlo, pues aquí están", añade el productor cordobés, recientemente nominado a un Grammy Latino por su labor en el disco "Rompiendo el Silencio", de Remedios Amaya.

Lo cierto es que la mezcla y la propia obra tienen un eco 'morentiano', como el propio Vacas reconoce, aunque matiza que este villancico no es estrictamente fusión, sino "un mensaje muy potente" arropado por las músicas que todos los involucrados están acostumbrados a llevar en la mochila, el flamenco, la vanguardia, y sobretodo "el riesgo y las ganas de abrir nuevos caminos".

"Vivimos en un mundo más o menos cómodo, siempre nos estamos quejando de las cosas que nos están pasando, pero siempre hay otros que están peor que nosotros", reflexiona el productor, que en el videoclip de la canción ha mirado directamente a los conflictos armados de Siria e Irak, donde "los niños son siempre los principales perjudicados".

REFLEXIÓN SOBRE UNA HISTORIA BÍBLICA

De hecho, el tema en cuestión parte de la reflexión sobre una historia bíblica que desgraciadamente se repite en la actualidad, en este caso el genocidio infantil de Herodes, y también por los sentimientos que ha experimentado con la paternidad y que apenas le permiten aguantar un telediario.

"Después de 21 siglos, seguimos siendo los mismos monos que comemos 'panchitos', aunque vayamos al cine, y nos fijamos muy poco en la vida de los demás. Creo que hay que ser más solidarios y tener un mínimo de responsabilidad para conseguir que todos seamos iguales", concluye Vacas.