En el primer semestre del 2011, una tendencia surgió en el mercado de EEUU: autores desconocidos que, prescindiendo de editores y librerías, a precios de derribo y con promoción en blogs y redes sociales, autopublicaban sus libros como ebooks para el Kindle de Amazon y ocupaban la lista de más vendidos con una oferta que resucitaba en versión digital la vieja pulp fiction . Las cosas van tan deprisa que, en cuestión de meses, los principales autores autobestsellers empezaron a llegar a acuerdos con editoriales para lanzar sus libros en papel, o en otras lenguas. Este fenómeno ya ha llegado a España, y quemando etapas: dos meses después del lanzamiento del Kindle, cinco de los siete autores autoeditados que se han colado en su top 30 ya han fichado por B de Books, el sello digital de Ediciones B.

Los nuevos autores de B de Books se incorporarán a este sello, manteniendo el precio digital de sus libros en 0,99 euros, y verán publicadas sus novelas en bolsillo el 16 de mayo a menos de ocho euros: El manuscrito , de Blanca Miosi (una historia con un libro misterioso que ha llegado a alcanzar el número 2 en Amazon.es), Juicio final , de César García Muñoz (una fantasía apocalíptica, también número 2), El secreto del tío Oscar , (misterios familiares, del prolífico Fernando Trujillo), Realidad aumentada , un tecnothriller de Bruno Nievas, y El enigma de los vencidos (secretos de guerra y exilio), de Armando Rodera.

EL PARAGUAS DE LA EDITORIAL Lucía Luengo, la editora de Ediciones B al cargo de esta operación, ha convencido a los autores de que asociarse con una editorial y compartir los ingresos de sus ventas puede valer la pena frente a la autoedición pura y dura: "Les damos la infraestructura para que sus obras estén presentes no solo en Amazon sino en todos los puntos de venta digital; eco mediático, el aval de un filtro de calidad para destacar entre miles de autores autoeditados y la posibilidad de publicar en papel; y respetamos la forma con que ellos han sabido comercializar sus libros, con precios muy atractivos y sin el sistema anticopia DRM".

Los libros autoeditados, reconoce Luengo, no tienen grandes aspiraciones literarias pero "son entretenimiento para un público amplio, con tramas que enganchan". "Busco únicamente un objetivo final: entretener y hacer pasar un buen rato al lector", confirma Armando Rodera.

Que los libros autoeditados sean la versión digital de la literatura popular de kiosko es uno de los principales reproches (o no) que se les puede hacer. Otro, que estén escritos sin las correcciones y una segunda opinión que requiere incluso el autor literario más sólido. Aquí, de nuevo, opina Luengo, se abre un margen para que las editoriales puedan seguir conservando su papel como intermediarias entre autor y lector en el entorno digital: "Ofrecemos un enfoque profesional, trabajar con ellos en la edición de sus textos para ayudarlos a crecer como autores y a ganar lectores".

NOVELAS RECHAZADAS El pediatra de Almería Bruno Nievas lo empezó a hacer por su cuenta: colgó su primera novela, La realidad aumentada , gratis, inspirado por La red social . Tras las primeras 42.000 descargas da el paso a la edición y se promete "seguir aprendiendo" como autor, aunque tiene claro que su opción por los precios bajos en internet está bien encaminada: "Logrará transformar la piratería en algo residual". En su caso, "hará que la novela llegue a más gente, y si encima disfrutan con ella, entonces será completamente feliz". Blanca Miosi decidió publicar una novela rechazada por

editorial en Amazon como un "experimento": el resultado conseguido fue miles de microventas. Por su parte, Fernando Trujillo considera "una suerte" participar "desde el principio de lo que estoy seguro va a ser una revolución en la transmisión del conocimiento".

EL PELIGRO DE LA DESERCION Pero más que la autoedición de autores noveles, otra tendencia inversa (además del hundimiento de los precios) es la verdadera pesadilla de los editores. Que autores con un público ya fiel decidan que pueden prescindir de su editor, sobre todo si este insiste equivocarse vendiendo (mejor, no vendiendo) sus ebooks caros.

El caso más evidente en nuestro país es el del escritor Juan Gómez-Jurado. Con una versión online autoeditada del libro Contrato con Dios a menos de dos euros ocupa hoy el número uno de Amazon.es y de la iBook Store de Apple. El escritor español no había cedido en su momento los derechos digitales a la editorial que publicó sus libros, así que los ha explotado con el precio que considera "razonable cuando el libro ya es de fondo". Según Gómez-Jurado, solo cuando la edición en papel sea marginal frente a la digital los autores se plantearán volar solos, aunque cree que ya es imparable "el proceso de reducción de la intermediación".