Como un homenaje a la literatura popular, los bolsilibros "de a duro" de la editorial Bruguera que triunfaban durante los años sesenta, concibe el cordobés Rafael Ascanio García su novela La amenaza reptiliana , que presentó anoche junto a la ilustradora de su portada, Violeta Cejas, y la escritora María del Pino en la librería Luque. Sin embargo, no es el verdadero nombre del joven escritor (25 años) el que verán los lectores en esa portada concebida al estilo de los cómics, sino el de Markus Kowalski, pseudónimo con el que quiere homenajear a los autores de aquellos libros que se vendían como rosquillas en los quioscos.

La novela, autoeditada por este técnico en preimpresión y en animación sociocultural tras desistir de encontrar editorial que la llevara a su imprenta, viene a ser "un cruce entre la ciencia ficción distópica y las obras más pulp ", según la define Ascanio. Un divertimento provocativo con el que el autor se propuso dar salida a su afición literaria y, de paso, confiesa, entretener sus "largas horas de parado".

"La distopía es lo contrario de la utopía --explica--. A mí me gusta mucho Orwell y su 1984 , y quería recrear la sociedad actual con unos matices más oscuros y decadentes; y lo de pulp , término inglés que deriva de que estas novelas las imprimían con pulpa de madera, material que abarataba el producto, responde a que yo pretendo que mi novela sea asequible para todo el mundo y amena".

La amenaza reptiliana derrocha imaginación, ciertas dosis de crítica social y humor gore . Narra las desventuras de Costa, "una chica audaz perteneciente al Frente Unico del Zorro que tras una fracasada revolución deja su partido, lo que este no le perdona, y tiene que huir a la vez de los que habían sido los suyos y del Gobierno", esboza Kowalski. Por el camino tendrá que hacer frente a una teoría de la conspiración que habla de fuerzas extraterrestres con apariencia humana bajo la que se ocultan reptiles, de ahí el título de esta provocativa sátira.

"Por reírme de las conspiraciones, que no me las creo, en ese mundo ficticio dejo los poderes políticos y económicos en manos de los reptilianos --apunta--. Pretendía hacer una metáfora de la sociedad actual pero sin hacerla pesada, buscando que la gente se entretenga leyéndola". Ascanio, al modo de sus admiradas novelas pulp , incluye un epílogo en el que parodia el estilo periodístico en una falsa noticia de prensa que titula 'El envejecimiento superado'. "Quizá rescate la idea de los anuncios falsos --dice-- en futuras novelas".

Y es que esta obra "aventurera y demoledora" es la primera de su autor, que ya trabaja con otras tres novelas por entregas publicadas semanalmente en su blog, markuskowalskificcion.es.