El 22 de abril se inauguró el 19º Festival de Cine Español de Málaga con la proyección de 'Toro', la película de Kike Maíllo ('Eva', 2011) que protagonizan Mario Casas y Luis Tosar con José Sacristán y que se puede ver en Córdoba desde entonces. Un thriller con bastante acción rodado en Málaga. Quizás por eso haya abierto la sección oficial aunque sin competir por la Biznaga de Oro. Las que sí competían y figuran ya en la cartelera local son el drama de relaciones laborales 'La punta del iceberg', de David Cánovas con Maribel Verdú como protagonista, y la comedia coral 'La noche que mi madre mató a mi padre', de Inés París, con Belén Rueda como actriz. Otros títulos exhibidos en este ciclo fueron el musical sobre desahucios 'Cerca de tu casa', donde la cantante Silvia Pérez Cruz interpreta con dolor y veracidad; con el mismo tema, como la aclamada 'Techo y comida', pudimos ver 'Zoe'. Lo teatral también ha rondado por alguna de las películas a concurso. Me refiero a 'El rey tuerto', que expone el enfrentamiento entre un antidisturbios y la víctima, todo en la intimidad. En 'Rumbos' se entrecruzan diferentes historias de amor en distintos vehículos. Lo mejor de 'Quatretondeta' es el trabajo de Sacristán en el papel de un viudo perdido con un cadáver robado rumbo al pueblo que da título al filme. 'Julie' es una misteriosa joven en una comuna alejada del mundanal ruido en busca de sí misma. La superproducción 'Gernika' de Koldo Serra narra por primera vez los trágicos hechos históricos conocidos por el mural de Picasso. Ricardo Darín protagoniza la coproducción con trasfondo histórico 'Kóblik'. También se presentaron la inquietante 'Callback', finalmente ganadora, y la comedia televisiva 'El futuro ya no es lo que era'. Y, por último, la que para muchos, entre los que me cuento, era la favorita: 'La próxima piel', de Isaki Lacuesta e Isa Campo.