Luisgé Martín (Madrid, 1962) se pregunta si aún existen paisajes donde parezca que el mundo está recién creado. Y para ello, se embarca en un largo viaje donde geografía y espiritualidad se dan la mano, y de paso descubrir algunos de esos lugares inaccesibles y solitarios en algún rincón de España, sobre todo a donde huir del extraño mundo del siglo XXI. El narrador no ha hecho sino buscar espacios en los que el silencio se pueda tocar, oler y pisar; poblaciones fantasmales porque, o están a punto de desaparecer, o tan solo queda de ellas su recuerdo, como es el caso de numerosos pueblos abandonados o sepultados bajo las aguas de un pantano, Mansilla de la Sierra, Riaño o Vegamián.

Donde el silencio (2013) se convierte en un libro de estampas narradas sobre sitios que nunca son visitados o localizados por turistas al uso, porque en su mayoría son desconocidos, y donde la vida en otros tiempos era distinta, y los juegos de los niños aun inocentes, los árboles crecían cada año a la par que pasaba el tiempo por sus habitantes, y los olores se mezclaban tanto con lo limpio del lugar o las boñigas de los animales; el perfume recordado de algunas de nuestras infancias. Son esos minúsculos lugares casi irreconocibles en un mapa, tan hermosos como utópicos, pueblos y aldeas que se parecen a los que nosotros mismos nos hemos criado, caso de San Justo de La Vega, el poblachón que hay justo antes de llegar a Astorga, un lugar donde habitan personajes como David, un ejecutivo que huyó de Barcelona, para verse rodeado de soledad e inmerso en el silencio, a la espera solo de que alguien quiera o pretenda echar una charla. El autor ha ido pergeñando sus páginas mirando por las ventanas de muchas de las casas que ha visitado por la geografía rural de una España salida casi de la paleta de los tonos negros y grises de Solana, o través de los ojos de quienes eran sus moradores, personajes que un día decidieron vivir a espaldas de una modernidad. Esos que, como él mismo, decidieron buscar algo que no tenían, y según constata Luisgé Martín, con un propósito diferente cada uno. No es, por consiguiente, un libro de viajes al uso, visitando y recreando una concreta geografía, sino buscando personas que piensan y sienten diferente. Luisgé Martín cuenta, reflexiona, valora y hace de su viaje auténtica poesía, y nos mueve entre Avila y Segovia, Guadalajara y Lugo, para pasar de Asturias a Zamora, y terminar en Navarra. Quizá esto sea lo más curioso, y aquello que al jurado del Premio Llanes ha llamado la atención: convertir lo difícil en algo fácil. Someter al lector a un irresistible deseo en busca de un lugar único, aunque dando vueltas por una amplia geografía de tan extraña ubicación, y con una única meta: encontrar el silencio.

'Donde el silencio'. Autor: Luisgé Martín. Edita: Imagine. Premio Llanes de Viajes.