Manuel Gahete es con seguridad uno de los poetas cordobeses actuales de mayor reconocimiento nacional y hombre, también sin duda, de mérito intelectual innegable. Él inaugura esta primavera con su poemario El mundo de Blue, que se suma a su veintena de poemarios editados y engrosa su ya conocida vertiente lírica de poesía infantil, en la que destacan sus Ángeles de colores y Cosas que importan, de 2002 y 2008 respectivamente. Como nombre propio, Blue, y como calificativo de honda significación literaria y simbología cálidamente musical y colorista, «Azul», se incorpora el término para caracterizar a un protagonista felino que entrecruzaría con la fábula clásica y con la tradición cuentística de procedencia oriental.

Blue es un gato, un esponjoso gatito que se incorpora al aprendizaje sentimental de los niños, que juegan con él convirtiéndolo en confidente y lo oyen maullar mientras se les despiertan los mejores valores de positividad y las alegres vivencias. Blue, listo, atento y educado y de bella suavidad -porque «Su cuerpo es un puzle/ entre nieve y miel»- da paso a todo un imaginario de agradables y tiernos animales (el hipopótamo, la jirafa, el león...) que suscitan dulzura bajo el epígrafe de «Mascotas», que junto a los siguientes «Papás y mamás» y «Amigos de aventuras» estructuran todo un contenido lírico donde descollarán valores que enaltecen la personalidad y orlan de felices sentimientos la edad infantil.

No hay mejor bien que darle a la infancia felicidad, poesía y comunicación constructiva. Es lo que hace Gahete con estos versos alegres, musicales, coloristas y cultos que fomentan la amistad, la colaboración, la igualdad y hasta el acercamiento de culturas, pues los poemas atienden -en versión bilingüe español e inglés- el dinamismo lingüístico de modo conveniente, y así: «Porque saber lenguas/se ha puesto de moda,/a la granja llega/un profe de idiomas».

No exentos estos versos -bien medidos y rimados en cómputo hexasílabo- de ramalazos de humor e, incluso, de ironía, en su estructura tripartita fomentan la ilusión, ponderan con realismo las ocupaciones de los padres y alientan con esperanza las profesiones futuras de los niños. En su enlace con la tradición ofrecen en ocasiones una intertextualidad reconocible (lo que ocurre, por ejemplo, en el título «Los cerditos rosas», eco de aquel famoso lagarto lorquiano), y a la vez un metaforismo que se vierte en comparaciones ágiles y realistas (por eso, al cimbrar, el cuello de la jirafa es el «que parece un junco/movido en el viento»), y todo, en fin, va volcándose en una realidad cotidiana que el autor reconoce vivir o ha vivido, huyendo siempre de la negatividad «de dragones malos,/devolviendo al mundo/la paz que soñamos». No quepa pues duda de que en este original poemario Gahete ve cumplido un triple objetivo de desarrollar la poeticidad en el niño, de orientarlo para que crezca en su libre creatividad y de imbuirle un siempre beneficioso sentido crítico. El mundo de Blue, como tantos otros mundos y personajes de cuento, es un espacio lírico que hace verdadera la frase ya irrenunciable de que «la belleza está en el interior».

‘El mundo de Blue’. Autor: Manuel Gahete. Edita: En Huida. Sevilla, 2018.