En la brevedad reside la intensidad. Máxime si detrás hay un especialista en ese tipo de distancias como es Manuel Moyano. Para qué decir más si en unas líneas se puede dar la clave de acercamiento a un libro. Moyano hace un repaso por títulos y autores y ejerce otro tipo de crítica menos extensiva, más incisiva y ligera a un tiempo, y sobre todo más atractiva hacia el lector, ya que desnuda la esencia de cada libro en poco espacio, cuestión no exenta de riesgos.
En ese período de dos años, Moyano pone a prueba su capacidad crítica en el suplemento cultural Ababol, del diario La Verdad. La selección es ecléctica y heterogénea, pero no se puede ocultar la mirada preferencial del autor, que aunque además se decanta por el género del relato en cuanto puede, no obvia otros géneros como la novela u otras formas de prosa.
Una lectura de este tipo puede resultar amena, pero también jugosa porque no es solo ponernos sobre la pista de una u otra obra, sino abrirnos una puerta diferente, con la que no contábamos o desconocíamos que estuviera ahí. Todo ello hace que este itinerario sea lustroso, cómodo, rico y se repare tanto en autores clásicos como en otros más actuales con un disfrute por la buena escritura, en la que no cabe duda, el criterio del autor se dispone de forma diáfana.
Los ocho prólogos del final, también nos reportan el manejo de Moyano en esas lides, con una prosa que parece fácil, cuidada y mimada, pero que también encierra su complejidad, y que nos adentra en esa perspectiva-mirada tan peculiar y certera sobre la columna vertebral de cada libro que aborda. De cierre un film, y la honda impresión que causó en toda una generación. Una lectura sobre lecturas, una mirada hacia otras miradas.
‘Noventa libros y un film’. Autor: Manuel Moyano. Editorial: Murcia Libro.
Murcia, 2016
