En mayo del 2011 las inlluvias provocaron una avenida extraordinaria del arroyo Guiomar en pleno núcleo urbano, provocando cuantiosos daños materiales y personales. Los estudios posteriores a esa inundación elaborados por Emproacsa pusieron de manifiesto que, si bien las lluvias y las circunstancias en las que se produjeron fueron extraordinarias, para otras precipitaciones de carácter fuerte la sección de la galería resultaba insuficiente. Además, los informes concluyeron que el tamaño y la forma de las embocaduras son inadecuados para canalizar los caudales de avenidas, así como que los cauces previos a las embocaduras se encuentran mal conformados, sucios, con obstáculos y sin capacidad para vehicular avenidas extraordinarias. Se detectó también que la propia galería se encuentra dañada.