La Plaza de la Villa de Dos Torres acogió ayer el tradicional festejo taurino de la Vaca de San Isidro que se realizó en una plaza de toros formada por carros antiguos de madera, en la que se soltaron, una a una, cuatro reses, de la ganadería de Ramón Sánchez, de Córdoba.

El festejo estuvo patrocinado por el Ayuntamiento de Dos Torres y organizado por la asociación cultural La Charlotá, cuyo presidente, José Rafael Madueño, explicó que los trabajos para colocar la plaza, a la antigua usanza, se prolongaron durante toda la semana con la colocación de 21 carros de madera, buena parte de ellos propiedad del colectivo, unidos con más de cien palos de madera, dejando los huecos reglamentarios y anudados cumpliendo todas las medidas de seguridad. Con el aforo completo de espectadores, muchos de ellos sobre los carros, pasadas las cinco de la tarde comenzaba la suelta de las vacas, que llegaban al ruedo, cubierto por albero y tosca, por las calles Salud y Hospital.

Numerosos aficionados llegados de Ciudad Real, Jaén, Palma del Río, Córdoba y Obejo, junto a los procedentes de los distintos municipios de Los Pedroches y jóvenes de Dos Torres, se enfrentaron a las reses con carreras, saltos, quiebros y algún pequeño susto.

Este año, como novedad, el encierro de reses se celebró a primera hora de la tarde, tras la actuación musical del grupo Gambayá y de un espectáculo ecuestre que se desarrolló al mediodía.

José Rafael Madueño señaló que se cobró una entrada para presenciar la suelta de las reses sobre los carros o en el balcón de los soportales cuya recaudación la asociación La Charlotá destinará en parte a la Asociación Contra el Cáncer y a reparar y conservar los carros antiguos.

Con el lema de Dos Torres, tradición y pasión por el toro, la actividad se desarrolló sin ningún percance relevante. Tras la suelta de vaquillas comenzó la actuación musical del grupo local Direct Music Band.