La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) estima "en un millón de euros las pérdidas en la Campiña Sur cordobesa ocasionadas por los efectos del temporal de viento y lluvia" tras el desbordamiento del arroyo Salado y el río Cabra, que han provocado daños en los cultivos. En un comunicado, UPA ha exigido a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), dependiente del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación, que realice "obras de emergencia" para salvar los cultivos e "infraestructuras" actuando a lo largo de los cauces afectados.

Este colectivo ha apuntado a la limpieza y el ensanchamiento de los cauces, y a la protección y estabilización de sus márgenes, como algunas de las necesidades básicas. También ha demando la condonación del canon y tarifa de riego para las hectáreas que no se hayan podido regar durante esta campaña o se vean perjudicadas por los desbordamientos, así como ayudas directas para recuperar la capacidad productiva de las explotaciones agrícolas afectadas.

"Un año más seguimos sin ver limpios y arreglados los cauces del arroyo Salado y del río Cabra", han denunciado, ya que las precipitaciones del pasado fin de semana ocasionaron su desbordamiento y la "inundación y destrozo" de las fincas y cultivos colindantes.

Los daños ocasionados en las huertas bajas, Monturque y las bocas del salado superan las 1.000 hectáreas de daños en cereales de invierno, espárragos, alcachofas y hortalizas, en general, además de problemas en infraestructuras viales e hidráulicas. La estimación que hace UPA de la pérdida de capacidad productiva de los agricultores afectados supera el millón de euros.