El Ayuntamiento de Baena ha pedido al Gobierno central que la travesía del municipio deje de ser carretera y revierta como vía urbana. "Creemos que una arteria como esta, de unos ocho kilómetros aproximadamente, deberá revertir para poder realizar actuaciones sin necesidad de tanta burocracia", ya que la variante lleva ya nueve años funcionando, ha afirmado el concejal de Urbanismo, Francisco Garrido.

El edil hizo ayer este anuncio durante su visita a las últimas actuaciones del Consistorio en la red de alcantarillado, acompañado por la concejala Manuel López. Garrido explicó que la última actuación ha consistido en la sustitución de la red existente entre el tramo de confluencia de la avenida San Carlos de Chile y la de Castro del Río hasta el emisario general. Como consecuencia de la ampliación del casco urbano, cuando hay precipitaciones el alcantarillado de esta zona no podía absorber el agua y ahora la sección de alcantarillado ha pasado de 600 a 1.000 milímetros y en la intersección con la calle Calderos a 1.200, por lo que esa tubería admite hasta tres veces el caudal normal. Esta intervención ha contado con un presupuesto de 95.596,87 euros y la ha llevado a cabo la cooperativa de construcción Nuestra Señora de las Angustias.

Una segunda obra que aún no se ha iniciado consiste en la reparación del asfaltado del tramo de la avenida San Carlos de Chile delimitado entre avenida de Cañete de las Torres y la de Castro. La actuación consiste en el fresado de la capa de asfalto existente para posteriormente volver a realizar un nuevo asfaltado con una capa de aglomerado. También se realzarán los trece pozos de registro existentes. El presupuesto es de 39.020,39 euros y la empresa encargada es Construcciones Glesa. Garrido comentó que para molestar lo menos posible están estudiando hacerlo de noche, al tratarse de una de las principales arterias de Baena.